Femicidio de Basaldúa: la querella y la defensa reclaman una nueva investigación
En un hecho inédito ambas partes coinciden en criticar a la fiscal Paula Kelm. Apuntan tanto al dueño de la vivienda dónde se alojó la joven en Capilla del Monte como a la policía local.
El femicidio de Cecilia Basaldúa, cuyo cuerpo fue hallado en un descampado de Capilla del Monte, está lejos de resolverse pese a la elevación a juicio contra Lucas Bustos, un changarín de 24 años.
La última novedad es que la querella que representa a la familia y la defensa del único imputado coinciden en que se trata de un "perejil". En cambio apuntan los cuestionamientos al manejo de la investigación de parte de la fiscal Paula Kelm y remarcan que el verdadero asesino se encuentra suelto.
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“Desde que la figura del femicidio existe en la Argentina, nunca la querella y la defensa fueron por el mismo lado. Este es un caso único”, dijo Sergio Sánchez, defensor de Bustos, en diálogo con La Nación.
La abogada que representa a la familia de la víctima, Daniela Pavón, confirmó que no apuntan contra el joven changarín. "La causa se elevó a juicio, pero nosotros, como querella, no vamos a acusar a Bustos. Sabemos que es algo que no se ve mucho, pero la familia no quiere que un inocente vaya preso”, le dijo al mismo medio.
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La defensa del joven y la familia Basaldúa aseguran que la única prueba contra el changarín es una confesión que se obtuvo en la Comisaría de Capilla del Monte después de darle una golpiza.
En el comienzo de la pandemia Cecilia quedó varada en Capilla del Monte, dónde había ido para escribir un libro sobre su experiencia por diferentes lugares de América Latina.
Mario Mainardi, el dueño de la casa dónde se alojó Cecilia en la localidad serrana, fue el último en verla con vida y aseguró que se fue de allí por un brote psicótico.
La familia descree de esta versión por la demora en comunicar la desaparición y por las manchas de sangre que se hallaron en la casa del rosarino. Dichas manchas nunca fueron analizadas y el hombre pudo marcharse de Capilla del Monte para retornar a Santa Fe.
Las expectativas de la querella y de la defensa apuntan a la Cámara del Crimen de Cruz del Eje. Ambas partes esperan que se ordene una nueva investigación que apunte a Mainardi y a la policía local.
Bustos está imputado por "abuso sexual con acceso carnal, homicidio doblemente calificado por violencia de género y criminis causae” cuya escala penal incluye la cadena perpetua.