Para la justicia, Ignacio Martin, el joven de 19 años que se hizo pasar por médico y que llegó a ocupar un puesto de coordinación durante el brote de coronavirus, no tuvo cómplices en la Provincia ni en la municipalidad de Río Cuarto. 

El fiscal Daniel Miralles acaba de archivar la denuncia  presentada por dos concejales de la oposición, Gonzalo Parodi y Marcos Curletto, para determinar si había existido connivencia política en el caso, que dejó mal paradas a las autoridades. 

“Martín engañó a todos, actuó solo”, dijo el fiscal en diálogo con Radio Universidad. “De mi investigación, no surge que exista un delito perseguible de oficio” agregó. 

En Río Cuarto, Martín tenía en marcha dos investigaciones en su contra: una por falsedad ideológica, en la que se investigan también si fue responsable de la muerte de dos personas, a cargo de  Pablo Jávega. La otra sobre las posibles complicidades políticas dentro de la administración pública, que fue desestimada ahora.