Procesaron a un gendarme por el homicidio de un joven en Capital Federal
Facundo Scalzo fue asesinado el 17 de junio en el barrio Rivadavia. Se investiga si hubo "exceso en la legítima defensa".
Un alférez de la Gendarmería Nacional fue procesado por homicidio "con exceso en la legítima defensa" de un joven en el Bajo Flores de la Ciudad de Buenos Aires.
La decisión fue tomada por Alejandra Alliaud, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°55. A su vez, se dispuso la falta de merito de un cabo primero y un gendarme.
El crimen
Facundo Scalzo tenía 20 años y fue asesinado de dos balazos por la espalda el 17 de junio en el Barrio Rivadavia - Villa 1.11.14, del Bajo Flores.
Según la causa, en la tarde de ese día una pareja denunció que la víctima junto a otras seis personas los abordaron y tras amenazarlos porque la mujer los habría acusado de vender estupefacientes en el lugar, comenzaron a disparar al aire. La mujer trató de huir del lugar, pero fue interceptada por otras seis mujeres que comenzaron a golpearla.
Tras realizarse una denuncia telefónica respecto a un tiroteo, personal de la Gendarmería Nacional fue al lugar. Según Gendarmería, Scalzo habría desobedecido la orden y extrajo un arma de fuego con la que empezó a disparar. Así, comenzó una persecución y un tiroteo que culminó con el homicidio de Scalzo. Por ahora, la Justicia está investigando si el arma encontrada en el lugar de los hechos pertenece al joven muerto.
La madre del joven y una testigo del hecho afirmaron a la jueza que él no portaba armas en el momento.
Griselda, integrante de la Red de Docentes, Familias y Organizaciones del Bajo Flores, y vicedirectora de la Escuela Media Nº3, declaró a Radio La Tribu: “parte de la estigmatización proviene de los medios rotulando que Facundo se venía escapando de la Gendarmería por haber cometido un ilícito, cosa que no es cierta. Aun si lo fuera, es una ejecución sumaria”.
Y agregó: “Facundo quedó tirado una hora tirado en el piso hasta que la ambulancia llegó. La Gendarmería no dejó que se acercara su familia a él para asistirlo y tampoco instrumentaron una medida para que el pibe pueda llegar al hospital”.
El gendarme fue procesado por homicidio calificado por tratarse de personal de fuerza de seguridad en funciones agravado por el uso de arma de fuego, con exceso en la legítima defensa y se le trabó un embargo de 1.600.092 pesos.
Según Télam, el gendarme reconoció que le disparó a Scalzo y que sus dos compañeros, que le dictaron la falta de mérito, sólo hicieron disparos al aire.