Sanadores egipcios: críticas a la confirmación de la prisión preventiva para todos los imputados
Claudio Orosz, defensor de Carolina Altamirano cuestionó la decisión del juez de Control. Sostiene que su defendida no formó parte de una asociación ilícita y su prisión domiciliaria no supone un riesgo procesal.
Luego de la confirmación de la prisión preventiva por parte del juez de Control para los 11 imputados y detenidos en el marco de la causa de los "sanadores egipcios", el abogado de una de ellas, Claudio Orosz criticó en duros términos la decisión al señalar que "no hay riesgo procesal" para mantener detenida a su defendida, que además es madre de dos niños, con los que no tiene contacto desde hace 5 meses.
Se trata de Carolina Altamirano, a quien la fiscal Analiía Gallarato acusa, al igual que al resto de los procesados, de "asociación ilícita, estafas reiteradas y ejercicio ilegal de la psicología", todos supuestos que Orosz desmiente. En diálogo con el programa "Entre Nosotros Rebeca" por radio Universidad, el abogado aseveró que su defendida "pagó por cada uno de los cursos brindados" por quienes estaban al frente de la "Fundación Seshen", relacionados con la medicina egipcia.
En ese sentido, aseguró que "no tiene nada que ver con las cabezas de la organización", en el sentido de haber formado parte de una "asociación ilícita" para estafar a los denunciantes damnificados. Más adelante, justificó que su defendida jamás "se presentó como psicóloga", de acuerdo al testimonio brindado por una de esas personas.
Orosz dijo que está preparando la "apelación de la medida", ya que en varias oportunidades le negaron la prisión domiciliaria a Altamirano, argumentando "peligro procesal", que según el abogado defensor no existe en este caso.
Agregó también que la decisión judicial, impide que su defendida mantenga contacto con sus dos hijos desde hace cinco meses. Por esta situación, la mujer inició una huelga de hambre a modo de protesta, en la que pide que su situación sea reconsiderada, ya que el mayor de ellos no quiere revincularse con su padre biológico, y los tribunales de Familia no tienen en cuenta la palabra del niño.