El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, Oscar Ojea, convocó este martes a todas las comunidades y parroquias a participar el próximo jueves de “una jornada de oración por la Patria”.

Pese a que la Iglesia como institución no se ha pronunciado en términos políticos respecto del balotaje que se llevará acabo el domingo 19 de noviembre para definir al nuevo Presidente de la Nación, muchos curas y sacerdotes manifestaron su desacuerdo con el candidato de La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei, quién dijo públicamente que el Papa Francisco forma parte de las "dictaduras comunistas asesinas" y es el "representante del Maligno en la Tierra".

La convocatoria a 48 horas de la elección presidencial, podría marcar una señal de la iglesia que pide resolver los problemas del país mediante el "diálogo" y "sin violencia". El propio titular de la Diócesis de San Isidro dijo días atrás, en nombre de la Iglesia argentina, que no eran apropiados los "insultos irreproducibles y falsedades" vertidas por Milei contra el Sumo Pontífice. 

Ojea advirtió que "le "preocupa mucho que haya aparecido un clima de autodestrucción, un deseo de que todo se desborde para caer en el vacío".

En la misma línea, un grupo de Curas en la Opción por las y los Pobres (COPP), dio a conocer días atrás un mensaje en el que denunció el "clima de violencia alarmante" y las "negaciones de lo evidente", al mismo tiempo que hizo una "invitación a la sensatez", a "la verdad y la justicia", reclamando "una democracia con justicia social" y "una patria independiente".

Este colectivo de curas villeros tercermundistas es el mismo que realizó en septiembre pasado una misa en la parroquia Virgen de Caacupé, en la Villa 21-24 del barrio porteño de Barracas, para desagraviar al Papa Francisco por los insultos del libertario.

Según consigna la Agencia Noticias Argentinas, Ojea también pidió sostener “un Estado presente”que no significa "hacer pobrismo ", y resaltó que es "irrenunciable el compromiso con el cuidado de la casa común". .

"En estos últimos años le hemos pedido a todos los gobiernos un Estado presente, tanto brindando seguridad como garantizando la provisión de bienes primarios para la vida humana, en particular en los barrios más humildes, el respeto por las economías solidarias, y la creación de trabajo genuino y digno, ya que el trabajo es un auténtico ordenador de la vida", aseguró el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina.