Bajo el slogan de no subsidiar "las películas sin espectadores" el gobierno de Javier Milei anunció restricciones en la distribución de subsidios del INCAA y en los gastos de funcionamiento del organismo nacional.

A través del decreto 662/24 que lleva la firma del ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, la administración libertaria estableció que las producciones audiovisuales que aspiren a subsidios deberán contar con un 50% de financiamiento propio.

Ver: "Reordenamiento" del INCAA: recortes, suspensión de apoyos y baja de contratos
 

Además la normativa fija un tope máximo de financiamiento y prohíbe que una productora reciba subsidios dos años.

La medida fue promocionada en las redes sociales por el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien manifestó: "Durante el año 2023 el INCAA ha financiado más de 100 películas que tuvieron menos de 1.000 espectadores".

X de Manuel Adorni

"Se ha decidido terminar con este delirio", afirmó el vocero en la principal arena de comunicación política del gobierno como es X.

Por otra parte el decreto también reglamenta que las partidas para gastos corrientes, estructura y funcionamiento del INCAA no podrán superar el 20% de los ingresos. 

En abril el gobierno eliminó las gerencias de Fomento, de Asuntos Institucionales, de Exhibición y Audiencias y de Fiscalización a la Actividad Audiovisual. En tanto que los empleados de estas áreas fueron suspendidos.