Luego de varias negociaciones y acuerdos con la oposición amiga, la Cámara de Diputados hará la revisión final del proyecto de Boleta Única, que ya fue aprobado por el Senado, y el Gobierno confía en que se convierta definitivamente en ley. Si lo logra, deberá modificar todo el calendario electoral, incluidas las fechas en las que se votará el año próximo.

La cámara de Diputados sesionará el martes próximo con un proyecto que debería quedar listo para votar en el plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales, de Justicia y de Presupuesto y Hacienda de la Cámara Baja, que se reunirá el lunes.

Complejo

Una de las dificultades que surgen a partir de esta iniciativa es la impresión de las papeletas, que respondiendo a un solo modelo, quedaría en manos del Estado y ya no a cada uno de los partidos políticos, como ocurre hasta ahora.

Según el artículo 64 del proyecto, “la impresión de las boletas únicas de papel, de los afiches con la publicación de las listas completas de candidatas y candidatos propuestos por las agrupaciones políticas que integran la Boleta Única y las actas de escrutinio y cómputo estarán a cargo del Poder Ejecutivo”.

Además, se aclara “que la Cámara Nacional Electoral establecerá un modelo base para todos los distritos, aunque cada Junta Electoral Nacional lo adaptará y la diseñará de acuerdo a la oferta electoral de su distrito pudiendo modificar las pautas establecidas”.

El problema en este caso surge porque solamente cinco empresas en todo el país están en condiciones de llevar adelante la impresión de estas papeletas, debido a su tamaño y la cantidad que se necesitan para cubrir a todo el padrón.

En paralelo, las autoridades deberán adaptar todo el calendario electoral: la duración de las campañas se ampliará de 50 a 60 días; la presentación de listas deberá hacerse 70 días antes de las PASO, en vez de los 50 actuales, y las alianzas tendrán que conformarse 80 días antes de los comicios, en vez de 60.

Por otra parte, el artículo 20 de la norma indica que “la convocatoria a elecciones primarias la realizará el Poder Ejecutivo nacional con una antelación no menor a los noventa (90) días previos a su realización” y que “deben celebrarse el primer domingo de agosto”.

O sea, si finalmente el Congreso sanciona el proyecto, en el 2025 las PASO se organizarán para el 3 de agosto.

Esta decisión, según anticiparon funcionarios que estarán al frente del proceso, se tomó con el objetivo de que las primarias estén lo más alejadas posibles de las generales, para que las imprentas tengan tiempo suficiente de imprimir las Boletas Únicas.

En el modelo mendocino las columnas son los lemas partidarios y las filas, el cargo electivo (gobernador, diputados, etc.). Imagen: Gobierno de Mendoza
En el modelo mendocino las columnas son los lemas partidarios y las filas, el cargo electivo (gobernador, diputados, etc.). Imagen: Gobierno de Mendoza

Siguiendo con lo que detalla el texto de la iniciativa, se deberá imprimir “una cantidad igual al número de electores correspondientes al padrón electoral, más un cinco por ciento adicional para reposición en caso de contingencias”.

 “En cada mesa electoral se dispone de igual número de boletas únicas que de personas habilitadas para votar, cifra a la que se le adiciona el porcentaje adicional establecido en este artículo”, establece esta propuesta.

La verdad es que no se comprende esta disposición: no existe mesa alguna en la historia de los comicios argentinos en que se haya presentado el 100% de los empadronados. De hecho, los promedios de concurrencia vienen bajando, con lo que hacer un sobre stock, parece algo sin sentido.

En cuanto a los comicios de octubre, el día de la votación sería el 22 de ese mes, y las campañas de los partidos para ese acontecimiento se iniciará 60 días antes de esa fecha y finalizará 48 horas antes de la votación, como es habitual.

En las próximas elecciones, la Argentina elegirá 24 senadores y 127 diputados nacionales, además de legisladores provinciales y, en algunos casos, gobernadores (Santiago del Estero y Corrientes) y autoridades municipales.