Tres de cada diez docentes son suplentes en las escuelas pobres: cómo afecta en la educación
Dependiendo la provincia, la suplencia en los docentes puede afectar el aprendizaje de los jóvenes, según un informe de Argentinos por la Educación.
El 28% de los docentes de 6° grado de primaria en escuelas argentinas son suplentes, relevó la organización Argentinos por la Educación.
Este porcentaje se acentúa en escuelas más pobres. En las escuelas primarias del cuartil (25%) más pobre, el 31% de los docentes son suplentes, mientras que este valor baja al 19% en el cuartil (25%) más rico.
Los datos fueron obtenidos de Aprender 2023.
Los maestros suplentes son aquellos docentes que cubren los puestos de docentes titulares o interinos que se ausentan de forma temporal por alguna licencia, sea por enfermedad, maternidad, cargos de mayor jerarquía, estudio o examen, entre otros motivos posibles.
Según el informe, las cifras más altas están en La Rioja (60%) y Entre Ríos (50%), mientras que las más bajas se encuentran en Jujuy (15%), San Luis (16%) y Salta (16%).
“La evidencia reseñada en el informe señala que tener docentes suplentes puede impactar de manera negativa en el aprendizaje, sobre todo cuando implica una interrupción de la continuidad pedagógica”, expresó la organización.
Pablo Mainer, director de la organización Hablemos de Bullying (organización integrante de Argentinos por la Educación), comentó en Radio Universidad que los motivos y los sistemas de suplencias varían en cada provincia.
En algunos lugares, las escuelas tienen procedimientos para suplir docentes de un día a otro. En otros lugares, el reemplazo puede tomar hasta 8 días.
“Esto dificulta la continuidad pedagógica de los chicos”, expresó.
“Las suplencias son fundamentales para asegurar la continuidad educativa cuando los maestros titulares no están presentes. Sin embargo, cuando las suplencias se utilizan con regularidad y cuando hay una alta rotación entre docentes titulares y uno o varios suplentes, el aprendizaje se puede ver afectado”, explica Martín De Simone, especialista en educación del Banco Mundial.
Posibles soluciones
Mainer señaló que estos datos pueden servir para implementar medidas para mejorar la educación.
Se debe apuntar a mejorar la salud de los docentes para que no falten. También señaló: “Hay docentes sobrepasados de trabajo”.
“Sabemos que la estabilidad (o inestabilidad) laboral docente se relaciona directamente con la calidad de los aprendizajes de los alumnos”, señaló Mónica Prieto, docente de la Escuela de Educación de la Universidad Austral.
Por otro lado, Mainer también expresó que agilizar el sistema de suplencias y efectivizar los sistemas de control de suplencias pueden mejorar la calidad educativa.