Crimen del remisero: para la fiscal los tres adolescentes detenidos fueron los autores materiales

Para la fiscal de Villa María, Juliana Companys, a cargo de la investigación del crimen del remisero Ramón Maldonado, ocurrido días atrás en la localidad de James Craik, los tres adolescentes de 17, 14 y 13 años detenidos, “son los autores materiales del hecho”.

No obstante, aclaró que solamente el mayor de ellos es punible, por lo que está imputado por “homicidio calificado ´criminis causa`”, mientras que los otros dos adolescentes de 14 y 13 años son inimputables, por lo que deberán ser sometidos a medidas tutelares por parte de los organismos correspondientes. La fiscal confirmó que los tres permanecen detenidos en el complejo Esperanza.

Por otra parte, Companys afirmó que espera los informes de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia (SeNAF), en relación a hechos anteriores protagonizados en los últimos años por algunos de ellos. “Entiendo que en el día de la fecha lo voy a recibir y podré evaluar si las medidas tomadas fueron oportunas o no”, señaló.

Mientras tanto, y también en diálogo con el programa “Alta Mañana” por radio Universidad, el Director de Desarrollo Regional de la SeNAF, Luis Gerchunoff, se refirió al tema y aseguró que “nada hacía suponer un desenlace como este”. 

El funcionario reconoció que si bien el joven de 17 años había tenido conflicto con la ley penal hace dos años, se habían tomado las medidas pertinentes al caso. “Estuvo involucrado en hechos menores”, dijo, por lo que se le dictaron medidas de contención como la “supervisión territorial” por parte de la jueza de Menores, que en este caso ordenó esa tarea al área competente del municipio de James Craik. 

En esa dirección, el funcionario resaltó que desde el Municipio se hicieron todas las cosas “debidamente”. La jueza cesó la medida penal juvenil en diciembre de 2021, atento a los informes elevados por el municipio, por el desempeño del joven para enfrentar su problemática, pero ordenó que sigan llevado adelante medidas de segundo nivel de protección de derechos, poniendo en cabeza al área local como responsable de eso.

“Estaba con contención familiar, había sido papá, estaba trabajando en la construcción, nada hacía suponer un desenlace como este”, reiteró Gerchunoff. Finalmente, relató que el joven de 14 años también había tenido algunos problemas menores y que padecía algún tipo de retraso o enfermedad mental, por la que estaba siendo tratado y contaba también con contención familiar.