Crisis del Sistema Científico argentino: la opinión de Daniel Barraco
Desde Enrique Gaviola hasta José Antonio Balseiro, atravesados por su paso por la Universidad Nacional de Córdoba, la historia de la ciencia en Argentina es tan rica como inestable, como lo demuestra la acuciante situación que se vive por estos días en el desfinanciado Instituto Balseiro.
Después de la denuncia pública formulada por Mariano Cantero, Director del Instituto Balseiro, respecto de la emigración de científicos que se van fuera del país o a otras empresas, sin poder seguir investigando, por la caída de los salarios y el desfinanciamiento del sistema científico argentino, el tema de la fuga de cerebros del que venimos hablando hace un tiempo, sigue siendo materia de preocupación. Por esto convocamos en esta oportunidad al Dr. Daniel Barraco Díaz, destacado profesional de la Universidad Nacional de Córdoba, Licenciado y Doctor en Física, y un hombre de dilatada trayectoria en gestión de sectores de la ciencia y la tecnología y profesor universitario.
Historias para entender el presente
A partir del conocimiento de lo que está sucediendo con el sistema científico en la Argentina, particularmente en el Instituto Balseiro de Bariloche, le consultamos a Barraco sobre los orígenes de este polo de la ciencia y su fundador que estudió en Córdoba, en la UNC, respecto de lo que nos contó que “Balseiro es la culminación de una revisión que se hizo sobre el proyecto Huemul, que era el proyecto de la bomba atómica, que había comenzado el General Perón, llevado a cabo por el austríaco Ronald Richter desde 1948 hasta 1952, durante la primera presidencia del mandatario, entonces Balseiro, después de haber hecho su doctorado, formado en Córdoba y haber ido a Inglaterra, cuando vuelve, hace una evaluación, una comisión y dice: -no, esto no va- y en función de eso se crea la Comisión de Energía atómica de la cual después, junto a un acuerdo con la Universidad de Cuyo, se crea el Balseiro, y forma parte de un gran proyecto que es de un mendocino, que es Enrique Gaviola que intenta armar esto y genera la Asociación de Física Argentina (AFA), se funda en el hotel El Cóndor allá por el año 1944, y él tenía un gran proyecto de generar algunos institutos como fue el Balseiro, con esa característica.”
El Dr. Barraco, siguió su relato contando que “Los estudiantes estuvieron becados, todos dedicados a hacer ciencia, en particular física, pero también estaba la astronomía y funda un gemelo, él mismo funda a la par un gemelo que es Famaf (Facultad de Matemática, Astronomía, Física y Computación) de la UNC. Somos primos hermanos, porque a nosotros nos funda directamente Gaviola y al Instituto Balseiro lo funda el discípulo de Gaviola, que es Balseiro, después Gaviola va a trabajar con su discípulo a Bariloche.”
La fuga de cerebros: un retroceso inaceptable
“Lo estamos viendo todos, estamos teniendo una emigración científica equivalente al 66 (1966) que fue un desastre por -la noche de los bastones largos- o la emigración científica igual al 76 (1976) después del golpe militar o una emigración científica equivalente a la del 2001, esto tiene un costo brutal para el sistema científico”, afirmó Barraco y agregó que “a mí cuando me dicen que se van a las empresas, es cierto, por primera vez a diferencia de las otras, los egresados se están yendo también a empresas privadas argentinas y eso no es malo, ha sido muy deseado, están haciendo ciencia en una empresa o van a trabajar en una empresa de informática”, para explicar que “el problema es que se están yendo al extranjero de nuevo, yo no creo que hay gente grande que ya volvió una vez al país y no va a volver dos veces, entonces el problema se ha vuelto acuciante, se veía venir y no es solamente por el salario, es más grave que lo salarial,,no es la primera vez, yo recuerdo que en el año 89 (1989) yo cobraba 45 dólares como doctorando, cuando estaba terminando mi doctorado, el problema es más grave, todos vemos que no quieren darnos ninguna luz final del túnel”, sentenció Barraco.
Daniel Barraco: “esto tiene un costo brutal para el sistema científico”
Más adelante, el Profesor Barraco señaló que “no sabemos a dónde va a parar el sistema, es más, me parece que la sociedad va a tener que dar una señal clara, pareciera ser que el problema en la Argentina fuera el sistema científico argentino y las universidades nacionales... nosotros somos los responsables del problema...?!”, se preguntó y afirmó “porque realmente que nos están ajustando a nosotros, no a Tierra del Fuego que le dan 1500 millones de dólares para que fabriquen cosas que pagamos todos más caro, pareciera que los problemas somos nosotros, los del interior, o los científicos, ellos no tienen nada que ver, la casta porteña o la casta a la cual responde la política, esa no tiene nada que ver...!?”, puntualizó enérgicamente.
A Barraco le consultamos sobre la cuestión estratégica, porque el ciudadano común, la gente de a pie, se pregunta cómo puede afectar esta situación al sistema científico de Argentina, lo daña a futuro, no lo daña muchísimo, es una cuestión que hace a las posibilidades de recupero de esa inversión que se hace para formar a los físicos en todo aquello que ellos investigan y descubren ?, a lo que nos respondió que “hipoteca el futuro, si no tenemos ingenieros, médicos, físicos, no tenemos futuro, nos estamos quedando sin nuestra gente joven”, y ejemplificó “en mi familia se fueron todos, nos quedamos los mayores de 50, tengo todos mis sobrinos en el extranjero, mis hijos en el extranjero, se fueron todos...!”, al tiempo que se preguntó e icrepó al Gobierno “qué van a hacer, cuándo van a parar...!?... Por supuesto que esto es parte del caos que han dejado los anteriores, por anteriores también hablo del gobierno del 16 al 20 (2016 a 2020) cuándo cortamos de hacer las cosas mal, perder oportunidades, cuándo creemos que el problema es la universidad, las universidades públicas y en particular del interior, la Universidad Nacional de Córdoba. Si quieren auditar, vayan yo les voy a dar varias de Buenos Aires para que vayan a auditar...! El problema es Buenos Aires, el problema es la Capital Federal llamada CABA, hoy en día se chupa todos los recursos que tiene el país, no han logrado hacer arrancar la economía.”
Asimismo Barraco lamentó “en Balseiro se están yendo todas las personas de 45 años para arriba, son 25 años para formar esa persona, un proyecto minero un proyecto minero de envergadura te lleva 10 años llevarlo adelante, los que están por comenzar ahora, estos grandes proyectos mineros llevan 10 años que empiecen a dar plata.”
Daniel Barraco: “pareciera que los problemas somos nosotros... o la casta a la cual responde la política, esa no tiene nada que ver...!?”
Consecuencias del desfinanciamiento
En nuestra investigación contemplamos los datos que nos permiten inferir que la gravedad de esta situación es de una gravitación importante porque no es sólo una persona que se va después de haberla formado, sino que los proyectos que quedan truncos y que no se pueden activar y desactivar como quien presiona un interruptor, los proyectos de investigación científica tienen todo un recorrido que si se corta hoy después tarda 10 o 15 años en volverse a reactivar, respecto de lo que Barraco asintió y agregó “además la gente de a pie se pregunta -qué nos dan los científicos más allá de la investigación y del paper, que qué nos dan ?”, a lo que nuestro entrevistados se respondió “ saben qué les damos...? Les damos radares que fabrica el país, les damos reactores nucleares que fabrica el país, les damos satélites que fabrica el país, les damos empresas que están exportando y estamos exportando alta tecnología, todo eso se cae, se está por caer, un sistema productivo que da ganancias...” y ejemplificó “es el caso del Laboratorio de Hemoderivados de la UNC, imaginemos que tuviéramos problemas con nuestros bioquímicos, Hemoderivados es la empresa líder en Latinoamérica en su rubro, impone el precio del marcado en toda Latinoamérica, se nos cae, por las acciones de dos o tres tipos, así vamos a hacer con todo, creen que así las fuerzas del cielo (como dice Milei) nos van a ayudar a sacar al país adelante...?!”
Siempre y hoy más que nunca se hace necesario volver a explicar y ratificar que todo lo que se hace en el sistema científico, va a patentes, va a derechos de soberanía científica, y eso significa un reingreso económico para seguir formando a los científicos y no es que sea una pérdida o un agujero negro el sistema científico argentino.
Al respecto, Barraco señaló que “hoy en día está siendo cuestionado el sistema científico y las universidades. No podés tener una empresa si no tenés ingenieros, no podés tener país si no tenés contadores, si no tenés abogados, no los vamos a tener en este camino, se menosprecia y menosprecia a la ciencia, al conocimiento, a la gente, que se va, nadie se queda donde no lo quieren, se va y si se van nos vamos a quedar solos, nos van a cuidar solamente los geriátricos, los que quedemos y no tenemos quien nos cuide. Ojalá vengan robots a cuidaros...! Nadie se dio cuenta que se está yendo todo el mundo...?!”, concluyó Barraco, visiblemente preocupado por la situación de desfinanciamiento del sistema científico argentino como consecuencia de las medidas de ajuste impulsadas por el Gobierno Nacional.
Estamos asistiendo a un momento bisagra en la realidad argentina, con diversos análisis respecto de este tema, por lo que lo de Barraco podría interpretarse como una visión apocalíptica o la fiel descripción de una cruel realidad que nos toca vivir.