Desastre ambiental: con 20 manzanas afectadas, buscan frenar el río cloacal en Córdoba
La Municipalidad montó un centro de emergencia para relevar las casas afectadas. Los trabajos de obras apuntan a desobstruir un caño de 700 milímetros.
Más de 500 personas afectadas por calles y casas inundadas de desechos cloacales, 20 familias evacuadas en hoteles y tres frentes de obras para desviar las aguas servidas, ese es el panorama que afrontan los vecinos de los barrios Alberdi y Villa Páez en la ciudad de Córdoba.
"Hemos logrado empezar a romper la zona del desastre", expresó el secretario de Gobierno, Miguel Siciliano, este miércoles en conferencia de prensa desde la carpa montada en el centro vecinal de Villa Páez.
Ver: Once familias evacuadas por el río cloacal en la ciudad de Córdoba
Desde el viernes pasado las familias que viven sobre calle Igualdad a metros de Remonda y en Arturo Orgaz, entre Igualdad y Tablada, sufren por el río cloacal que se formó frente a sus casas e incluso avanzó dentro de las viviendas.
El martes la Municipalidad tomó cartas en el asunto, presentó una denuncia penal para que se investigue a la empresa responsable y dispuso un comité de crisis en la zona para asistir a los damnificados.
En el límite de los barrios ubicados al noreste de la capital cordobesa las autoridades identificaron un nudo subterráneo. Sobre calle Igualdad se encuentra la principal obstrucción que provocó el colapso sanitario.
"Estamos achicando las cuencas de aporte para poder reducir a la mínima expresión el líquido, hacer la apertura del caño e identificar que está obstruyendo ese caño", afirmó el subsecretario de infraestructura municipal Juan José Tuninetti.
El funcionario explicó que para poder "secar" la zona crítica se dispuso una serie de desvíos hacia el colector noroeste.
El otro frente crítico es la calle Orgaz dónde las tareas se concentran en "descubrir todo el caño para llegar a la cuna y garantizar que no esté suelto", indicó Tuninetti.
En medio de este campo minado las familias intentan sobrellevar el día a día con miedo a que perder sus pertenencias. Incluso algunos temían abandonar sus viviendas ante el riesgo de una posible usurpación.
Al respecto Siciliano trató de llevar tranquilidad: "El estado municipal va a acompañar a todos los vecinos. No vamos a dejar que ningún vecino pierda algo que esto le llevó".
Sin embargo bajo el desastre ambiental los plazos del retorno a la normalidad está lejos de tener una fecha cierta.