La herencia en la barra brava de Belgrano: ¿Quién viene después del Loco Tito?
Al mismo tiempo que Roberto Ponce se despedía de la conducción de Los Piratas en las redes estallaban los mensajes que declararon a Lucas Pavón como el nuevo jefe . Es un recambio anunciado y con muchos capítulos previos pero aún con futuro incierto.
Al mismo tiempo que Roberto Ponce, el Loco Tito, se despedía de la conducción de Los Piratas en las redes estallaban los mensajes que declararon a Lucas Pavón como el nuevo jefe de la barra brava de Belgrano. Es un recambio anunciado y con muchos capítulos previos pero aún con futuro incierto.
"Roberto Ponce, quedás destituido del mando de la facción. La agarra Lucas Pavón y Gitano, y el Indio y yo nos vamos a encargar que así sea mis hermanos".
Eso decía una historia publicada en Instagram a poco de concluir el partido entre Belgrano y Quilmes que se jugó en Alberdi.
Pero algunos nombres son más conocidos que otros. Lucas Pavón era el jefe que asomaba desde hacía mucho tiempo y es el que desafió al Loco Tito a través de uno de sus hombres de acción: Cristian “Coquito” Torres que es quién firma en las sombras el posteo de recambio en la barra. Es el mismo que amenazó al Loco Tito y a su familia con audios que circularon por las redes sociales y motivaron varios allanamientos.
El Gitano, a quién ponen en pie de igualdad con Pavón, es Pedro Germán Minuet que durante varios años secundó al Loco Tito en la tribuna y fuera de ella y a quién acompañó en aquel viaje a Sudáfrica desde donde volvieron expulsados con otros barras bravas de Hinchadas Unidas. Hacía tiempo ya que el líder depuesto desconfiaba de su lugarteniente que comenzó a tejer alianzas en la barra algún tiempo atrás a medida que desafiaban a “los viejos” piratas. Su habilidad para hacer equilibrio todos estos años le permitió jugar a varias bandas.
El restante es el Indio Cabral, uno de los hombres de Pavón que se encarga con Torres de los asuntos pesados dentro de la agrupación y que cuenta, como todos los demás, con varios antecedentes penales.
Alarmas encendidas
Lucas Pavón no fue a la cancha el pasado lunes 15 cuando Belgrano se despidió de la Primera Nacional del 2021. Le cedió la previa y el post partido al Loco Tito y lo hizo también para evitar roces. Hubo cantos y fotos de los hinchas con el viejo jefe de Los Piratas que a pesar de todo sigue invitando a quien quiera a juntarse frente a su casa en Armengol Tecera 277 de barrio Alberdi para seguir yendo al Gigante cada vez que haya partido.
Pasaron 13 años desde la última batalla por el control de Los Piratas. Fue en noviembre de 2008 después de una derrota ante Tiro Federal por dos a cero cuando una feroz balacera en las calles Orgáz y La Tablada dejó un saldo de cuatro heridos de bala, uno de ellos grave. Los enfrentamientos siguieron después en las inmediaciones del Hospital de Urgencias donde estaba internada una de las víctimas. Fue la última vez que le disputaron la jefatura que ostentaba con el Jetón Víctor.
Ahora a pesar de dar un paso al costado El Loco Tito sigue diciendo a quién quiera escucharlo que aún está vigente: “Pensaron que estaba derrotado pero no es así”, dice en un tramo del mensaje de despedida.
Esto pone en alerta a varios sectores que miran de cerca la trama del recambio. La Justicia de Córdoba ya actuó de oficio cuando circularon las amenazas y el fiscal Guillermo Gonzalez ordenó cinco allanamientos en septiembre para frenar la escalada y observar detenidamente a todos los actores. La Policía sabe cuáles son los lugares donde se mueve Pavón: entre Villa Allende, Alberdi y Bella Vista. También los de Parque Liceo Segunda Sección donde Coquito Torres es oriundo y tiene fluidos contactos.
Entre la dirigencia de Belgrano se preguntan cómo será la respuesta del público desde las tribunas ante un rendimiento deportivo que desean sea mejor que el que acaban de dejar atrás. Hasta ahora los hinchas no fueron muy permeables a la influencia de la barra y hasta reprobaron muchas veces con silbidos las peleas en la tribuna norte. Pero saben que el pedido de entradas en algún momento llegará.
Aunque cambiaron a la empresa que controló los accesos al estadio la circulación de carnets de socios entre la barra siguió como antes.
Además Belgrano se clasificó nuevamente para la Copa Argentina y con ello se abre un negocio que siempre manejan los barras: los viajes. “Si Los Andes de La Liga Cordobesa va a alquilar entre 8 y 10 colectivos para llevar a su gente a la final con Juniors ¿Cuántos creés que va a desplazar Belgrano a un partido de Copa después de tres años sin viajar? Eso representa un montón de plata” calculó.
El interrogante que se abre ante la dirigencia es saber si los nuevos liderazgos, mientras se afianzan, no diriman sus diferencias en la cancha. Aunque no faltan los contactos necesitan un interlocutor legitimado. Quieren paz en la tribuna y una suerte de control.