En la entrada de los SRT hay un banco rojo en homenaje a “todas las mujeres que fueron asesinadas por quienes decían amarlas”. Se enmarca en una campaña internacional que tiene por objetivo recordar un problema social, estructural, que atraviesa todas las clases sociales, todas las culturas y nacionalidades: la violencia contra las mujeres por el solo hecho de ser mujeres. 

Este 25 de noviembre, una vez más, el mundo entero recuerda el Día Internacional por la Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres aunque las cifras indican que claramente no alcanza con recordatorios y homenajes.

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Desde el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación (MMGyD) informan que entre diciembre de 2019 y junio de 2022 se llevaron adelante “políticas públicas que llegaron a mujeres y LGBTI+ de cada rincón del país”. Estas políticas se traducen en números concretos como los del Programa ACOMPAÑAR que ha implicado el apoyo económico a unas 200.000 víctimas de violencia de género.

El Programa ACOMPAÑAR está destinado a fortalecer la independencia de mujeres y LBGTI+ en situaciones de violencia de género a través de un apoyo económico mensual, acompañamiento integral y acceso a dispositivos de fortalecimiento psicosocial. Se trata de una suma mensual equivalente a un salario mínimo vital y móvil durante 6 meses consecutivos y es posiblemente la medida más efectiva para paliar las violencias antes de que se conviertan en irreversibles. Un dato interesante es que para acceder a este programa no es necesario haber presentado una denuncia, un paso difícil y complejo para muchas mujeres que lo que necesitan es poder salir de manera urgente de la situación de violencia.

Es verdad que la asistencia económica es por un tiempo limitado y que el monto de la ayuda es claramente insuficiente. Pero también es cierto que en la base de la inmensa mayoría de las violencias se encuentran el depender económicamene del maltratador y/ o la precarización laboral y la pobreza. Por eso el apoyo económico para iniciar una nueva vida es fundamental. Y el empleo digno un derecho y un horizonte estratégico, pero de momento eso excede las competencias del ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad.

Además del Programa ACOMPAÑAR hay otras medidas económicas para cuando los mecanismos de prevención fallan, como el apoyo económico y la asistencia a familiares de víctimas de femicidio, travesticidio y transfemicidio.

En la inmensa mayoría de los casos las beneficiarias del Programa sufren violencia física y/o psicológica, pero también son asistidas víctimas de violencias sexual, económica, simbólica.

La situación en Córdoba

Maribel Balancini es coordinadora provincial del Programa AcercAr Derechos del ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación y trabaja en Córdoba como responsable institucional de todas las políticas del Ministerio. 

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Consultada por este medio acerca de la implementación del Acompañar en Córdoba afirmó que “para que los municipios y comunas puedan convertirse en Unidades Acompañamiento –desde donde se facilita el acceso al Programa- tienen que firmar un convenio con el programa nacional. En la provincia de Córdoba hay 94 localidades que han suscripto el convenio y asumido el compromiso de conformar equipos multidisciplinarios. Estas Unidades de Acompañamiento funcionan en las áreas de género municipales o comunales y donde no las hay dependen de las áreas sociales”. También constituyen Unidades de Acompañamiento el Polo de la Mujer y las profesionales del Programa AcercAR.

En Córdoba, según los datos oficiales que brindó Maribel Balancini “desde el 30 de noviembre de 2020 al 31 de junio de 2022 han sido destinatarias del Programa Acompañar 4004 personas, es decir mujeres y diversidades que sufren o han sufrido violencia por motivos de género, especialmente violencia doméstica para el 98 % de los casos”.

Lo que predomina en la violencia intrafamiliar, según los datos que maneja la funcionaria, es el maltrato psicológico. “Los insultos, las humillaciones, el hostigamiento, constituyen este tipo de violencia que es quizás la más invisible, sobre la que es indispensable trabajar, reflexionar, porque no siempre la violencia es física, para llegar a ella se transita un camino que se inicia con situaciones sutiles, como un grito, pero si no se problematiza esta situación se puede pasar muy rápidamente a la violencia física que empieza con empujones, tirones de pelo, golpes. Y también nos encontramos con situaciones de violencia sexual como el contacto físico sin consentimiento o la obligación de mantener relaciones sexuales”. 

Como se recordará, hasta la reforma constitucional de 1994 no se consideraban abuso ni violación las relaciones sexuales impuestas al interior de la pareja. Con la incorporación de los tratados internacionales en materia de derechos humanos, y los derechos de las mujeres son derechos humanos, se logró un avance crucial en materia de igualdad. Por eso, Balancini insiste en el consentimiento: “Es fundamental trabajar el consentimiento para frenar el abuso sexual que se puede dar en cualquier lugar, situación y edad, y hacerlo sobre todo con la ESI (Educación Sexual Integral) en la niñez y la juventud. Por eso es tan importante que reclamemos todos los días la efectiva implementación de la ESI en nuestra Provincia, en todos los niveles”.

Finalmente, la responsable institucional de las políticas del MMGyD en Córdoba destacó los datos que surgen de analizar la población beneficiaria del Acompañar: “las personas que ejercen violencia son en un 96 % varones, el 18 % tiene acceso a armas de fuego, el 24 % violó las medidas de restricción…y en un 84 % de los casos el agresor es la ex pareja”.

El ministerio de la Mujer de la Provincia

La oficina de prensa del ministerio de la Mujer de la Provincia de Córdoba facilitó a este medio un documento que incluye los objetivos generales de la gestión y los tres ejes de trabajo prioritarios.

Entre los objetivos destacan “Asistir al Poder Ejecutivo en la promoción, protección y restitución de los derechos de las mujeres, y coordinar políticas públicas desde una perspectiva de género, derechos humanos y diversidad; coordinar y transversalizar políticas, programas y planes de gobierno en materia de género a ejecutarse en todas las áreas del Estado provincial; promover el empoderamiento de las mujeres en diferentes ámbitos, propiciando la reducción de las brechas de género; adoptar medidas necesarias para poner fin a todo tipo de violencias y discriminación e impulsar la transformación cultural y la reflexión sobre los mandatos de masculinidad”.

Según el documento, para el cumplimiento de esos objetivos “se trabaja sobre tres ejes para prevenir y/o acompañar a las mujeres en situaciones de violencias”. Y detallan los ejes de la Prevención, de la Asistencia, de la Territorialización, de la Protección y también el trabajo con varones.

En cuanto a prevención la actividad se centra en la capacitación a través de la Diplomatura Universitaria en Formación de Acompañantes Comunitarias contra la Violencia de Género y que en esta 5ª cohorte tiene 9145 estudiantes de Argentina y de nueve países de Latinoamérica. Entre las personas que están realizando la Diplomatura hay 804 pertenecientes a las Fuerzas de Seguridad.

En el eje denominado Asistencia el documento destaca el Programas de fortalecimiento económico a través de Nuevo Rumbo Alquiler, “un subsidio no reintegrable de carácter personal y no remunerativo destinado al alquiler de vivienda para el establecimiento de nueva residencia y con el objetivo de minimizar las situaciones de riesgo, por un período de hasta 24 meses, según seguimiento y criterio profesional. Pasa de un monto de 18 mil pesos a 30 mil… Nuevo Rumbo Subsistencia (que) contempla tres cuotas que serán ahora de 22 mil pesos y Nueva Vida, destinado al empoderamiento e inclusión social de las mujeres víctimas de violencia, pasa de 13 a 20 mil”

Además destacan “Apross Por Vos, un programa de atención interdisciplinaria para personas en situación de violencia de género con 1100 mujeres beneficiarias” y una Escuela de Género, con distintas ofertas educativas como Educación Formal o Terminalidad Educativa. El informe consigna la realización de 28 cursos de formación de oficios, con 250 egresadas y el “Aula mamá con 150 egresadas del programa de terminalidad educativa del Polo de la Mujer”.

En cuanto a la Territorialización, el aspecto central es el Punto Mujer, un programa que pretende la descentralización territorial. “Los Puntos Mujer –reza el documento– se constituyen como el primer espacio de atención, con profesionales especialistas en violencia de género que brindan escucha, asesoramiento y contención a personas en situaciones de violencia; además de facilitar el acceso a diferentes programas de asistencia del Estado”. Se consignan “140 Puntos Mujer en todo el territorio provincial, en cada uno de los departamentos que componen nuestra provincia”, además de los Polos y las Unidades Regionales de Violencia… “Y en el periodo comprendido entre el 1º de enero y el 28 de octubre del año en curso el total de intervenciones registradas por todos los Polos y Unidades Regionales asciende a 21.113”.

En cuanto a Protección, dice el documento que en los primeros 10 meses del año se han entregado 5060 botones antipánico -3521 en la capital y 1539 en el interior de la Provincia- con el fin de monitorear y prevenir situaciones de violencia de género de riesgo moderado o alto, en un trabajo conjunto con el Departamento de Coordinación de acciones de Violencia Familiar y de Género y Delitos Complejos de la Policía de Córdoba.

Por último, el Centro Integral de Varones en situación de Violencia es una institución creada en 2016 que se encuentra bajo la órbita de la Secretaria de Lucha contra la Violencia a la Mujer y Trata de Personas del Ministerio de la Mujer de la provincia de Córdoba. En lo que va del año se han atendido 1600 varones y más de 15.000 en los seis años de existencia.

Hasta aquí la información brindada por el ministerio de la Mujer de la Provincia de Córdoba a través de su oficina de prensa. Sin embargo, las preguntas siguen en el aire: ¿qué se hace frente a los femicidios que no paran de crecer y que según el observatorio de los SRT ascienden a 22 mujeres asesinadas en lo que va del año? ¿qué indicadores se manejan para evaluar la efectividad, o no, de las políticas que se impulsan? ¿qué más puede hacer el Estado para afrontar el tema?

Información útil

Si sufrís violencia de género pedí ayuda en la Unidad de Acompañamiento más cercana. Ingresá en la  o comunicate con la Línea 144 para recibir información, enviá un WhatsApp al  o escribí por mail a