Algo huele mal en París: la mala calidad del Sena obliga a suspender competencias
La calidad del agua sigue generando demoras en el comienzo del triatlón. Al parecer, la lluvia y los desbordes cloacales habrían afectado el agua. Desde la organización ya evalúan la posibilidad de terminar desarrollando un duatlón.
De acuerdo a la información brindada por la organización de los Juegos Olímpicos de París 2024 se decidió aplazar las pruebas de triatlón después de que los análisis de calidad del agua revelaran que el Sena no alcanzaba el nivel exigido.
La competencia en la categoría masculina que debía comenzar este martes a las 03 am de Argentina, se reprogramó por el momento para mañana miércoles a las 05:45am. Sin embargo, todo dependerá de un nuevo análisis durante la madrugada. Si los niveles no mejoran, volverían a postergarse.
El pasado domingo la organización ya había informado sobre la suspensión de los entrenamientos debido a que la calidad del agua excedía los niveles de toxicidad permitidos. Según se informó de forma oficial, las constantes lluvia en la capital francesa habría ocasionado desbordes en el sistema cloacal y este habría afectado al afluente del río que atraviesa la ciudad.
La competencia del triatlón depende hasta ahora de las próximas pruebas de calidad que se realicen. La organización señaló que el viernes 2 de agosto es la fecha límite para desarrollar la competencia masculina y femenina. También, ya se prevé la posibilidad de desarrollar un duatlón, eliminando la natación como parte de las pruebas.
Es que a París lo persigue el mal clima. De acuerdo al Servicio Meteorológico Francés, se anuncia un alerta naranja por lluvias y tormentas para los próximos días. Si el pronóstico se cumple, los niveles de contaminación del agua volverían a subir e impedirían todo tipo de competencia.
100 años contaminado
París 2024 se esforzó para presentar al Sena como uno de los emblemas de esta edición olímpica y es por eso que buscó sanear el afluente para realizar competencias en sus aguas.
Durante 100 años estuvo prohibido sumergirse en el emblemático río que ostenta una longitud de 776 kilómetros y que recorre el centro de París. Con el objetivo de sanearlo y volverlo apto para la competencia, el gobierno francés invirtió más de 1500 millones de euros.
A solo días del comienzo de los Juegos Olímpicos, la calidad del agua seguía siendo una incógnita y fue por eso que la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, se sumergió ella misma en sus aguas para llevar tranquilidad.
Sin embargo, las lluvias de los últimos días ocasionaron el derrame de aguas servidas sobre el cauce del Sena y los niveles de presencia de Escherichia Coli y Enterococcus sobrepasan los niveles permitidos, lo que pone en riesgo la salud de los atletas.