El Ciclón arruinó el debut de Atenas en casa por la Liga Nacional de Básquet

En una noche en la que estaba previsto que fuera todo festejo de Atenas en el regreso a casa ante su público, el que terminó quedándose con los aplausos y todas las miradas fue San Lorenzo. Como pasó en el partido inaugural en La Rioja ante Riachuelo.

El Ciclón se aprovechó de un Griego que, a pesar del corazón que mostró tener en los minutos finales, estuvo lejos de la versión demostrada en el Súper 20 y se llevó un importante triunfo por 100-94, con el que se mantiene invicto en este inicio de Liga Nacional. El Penta ya no es el de antes, pero demostró que será un hueso duro de roer para todos.

¿Por dónde pasó el triunfo del Ciclón? Por la inteligencia de saber en dónde estaba la ventaja en cada uno de los momentos del juego; además de dejar en claro que es un equipo conocedor del libreto que le toca protagonizar a cada una de sus actores. En la vereda del frente, el Verde no pudo desanudar en toda la noche sus problemas ofensivos y los trasladó al costado defensivo, en el que las desatenciones muchas veces fueron más que la inteligencia del Cuervo para saber por dónde lastimar.

En lo estrictamente numérico, San Lorenzo hizo diferencia cada vez que pudo correr el rectángulo de juego (anotó 20 puntos de contrataque). Y puso nada menos que cinco de sus jugadores en doble dígito: José Defelippo (19), Mauricio Corzo (20), Laureano Zalio (19), Agustín Pérez Tapia (18) y Leandro Cerminato (13), guarismos que muestran su eficiencia en la noche y la endeble defensa cordobesa.

Otro punto fue lo hecho por las bancas, entre las que los de Álvaro Castiñeira casi doblegaron a la de Sebastián Saborido (42-24) gracias a la combinación de Corzo y Pérez Tapia. En el Griego, saliendo como alternativa de los iniciales, se destacó el capitán Daniel Hure con 13 unidades.

El primer cuarto fue un bombardeo. Saltaron esquirlas para todos lados. Atenas tiró para un 50 por ciento (5/10) y San Lorenzo para 62 (5/8), y fue este último el que por detalles se quedó con el segmento. Mientras que en los segundos diez minutos, el azulgrana destrabó las acciones con las apariciones de Zalio y Corzo, que se combinaron para concretar parcial de 11-3 sobre los minutos finales para quedarse con el 52-46 con el que empezaba a dominar la noche.

Tras el descanso largo llegó la reacción Verde. Inicio de 9-0, recuperación del liderazgo (55-52) y nueva historia. Se sacaron chispas y nada de ventaja. Apenas por detalles la visita fue la que se metió en los últimos diez minutos en ganancia: 72-69.

Y para el final quedó lo mejor. ¿Para San Lorenzo? No solamente, sino que para los dos. Los de Castiñeira se florearon y llegaron a tomar máxima 12 (91-79) con un gran rendimiento colectivo más allá de los individuales. Con corazón, Atenas intentó manotear el timón para enderezar el barco, y casi lo consigue. De todos modos no alcanzó y fue el elenco de Boedo el que se metió un nuevo triunfo en el bolsillo con el 100-94.