El Hugo, el 10 de la celeste

La historia dice que Hugo Fattoruso, uruguayo de Montevideo, nacido el 29 de junio del 43, es un notable artista como compositor, arreglador, productor, multiinstrumentista -básicamente, pianista, tecladista y acordeonista- y cantante, y que no sólo brilló como conductor primero de Los Shakers en los 60, de Opa en los 70, y de muchas otras formaciones después, como La Escuelita, Los Pusilánimes, Rey Tambor y el Ha Dúo, entre varias más, sino que le ha dado lustre a la música de gente como Jaime Roos, Chico Buarque, Milton Nascimento, Hermeto Pascoal, Eduardo Mateo, Rubén Rada, Airto Moreira y Djavan.

Todos dicen que el Hugo es lo más grande que hay.

Pero este señor que ya está pisando los 80 años va por la vida como si nada, haciendo lo que hace porque es sencillamente lo que sabe, y sin vanagloriarse de nada, sin hacer alharaca.

Da la impresión de que ha hecho los mejores goles acariciando la pelota, y que todos los equipos en los cuales jugó lo tuvieron de primera figura porque no es nada común que haya alguien que se pueda parar tan bien en la cancha como para hacer sentir a sus compañeros que con él, el equipo tiene más que 11.

Hugo Fattoruso es el 10 de la celeste desde hace casi 60 años, cuando apareció con sus pequeños 20 años mostrando que era posible ser un beatle más aunque estuviera tan lejos de Liverpool, incluso sonando en inglés, y que además se podía sumar a esa maravillosa estética de cambio algo personal y del sur. Es que ese botija tenía muchísimo resto. 

Después de Los Shakers, que fueron un exitazo y un desacierto económico para alguien tan jovencito y tan inexperto como él, en los 70 brilló en los Estados Unidos al frente de Opa, donde seguía secundado por un formidable baterista que era su hermano Osvaldo, y a donde había sumado a un cantante negro de notable talento, Ruben Rada. 

De aquel tiempo, donde parecía que los grandes tocaban el cielo con las manos, y eso no es solo una figura, dicen los estudiosos de los rankings que es cuando fue elegido uno de los mejores tecladistas del mundo. 

Y luego, ya retornado al Sur, se reinstaló en su tierra y desde allí sumó su arte en muchos grupos y a muchos grandes artistas que lo convocaron.

Hugo Fattoruso hace jazz, en principio, pero en realidad se debe decir que hace mucha música libre que suena bien de acá, del sur del mundo, o más puntualmente que es bien del Uruguay. Porque por ejemplo sabe del parche de los tambores aunque no es negro ni del Barrio Sur montevideano.

Tiene tanta historia de brillo que no alcanzarían 80 años para enumerarla.

Por fortuna, hay quienes lo saben y lo dirán, por eso se está anunciando ya un festejo importante en junio, para la celebración de su próximo cumpleaños.