Hace escasas semanas, obtuvo la licitación de parte del Estado nacional para la producción de batas y camisolines. Pero puertas adentro, la cara de la firma textil Legacy es otra.

En los últimos días, sus empleados ampliaron su "estado de alerta", al acumular medio año sin percibir sus salarios, agregando los dos últimos pagos del medio aguinaldo.

El único dinero que recibieron fue y sólo para quienes estaban incluidos, la mitad del sueldo como parte del programa ATP del gobierno nacional.

Por eso las críticas a la falta de compromiso con las negociaciones de la Corporación Río Luján, a cargo de la confección de indumentaria marca Legacy, se multiplican.

La pandemia terminó agravando una situación que de por sí era delicada para una firma dedicada a la ropa de "primera mano" y con sucursales distribuidas en los centros comerciales más caros del país.

En la cuestión interviene el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires.