Coaching: la prédica neoliberal
El coaching es un proceso de desarrollo en el cual una persona con una experticia determinada, conocida como coach, asiste a un alumno o cliente (coachee) a quien orienta y evalúa durante un periodo de tiempo determinado con el objetivo de ayudarlo a alcanzar una meta específica y lograr el máximo rendimiento posible de acuerdo con las capacidades y habilidades naturales que tenga.
El documental
Nacido en EE.UU.,Tony Robbins, es un escritor de libros de desarrollo personal y autoayuda y es coaching motivacional.
En sus trabajos utiliza la programación neuro-lingüística y el coaching estratégico.
Ha asistido a personalidades como Mijaíl Gorbachov, Bill Clinton, Nelson Mandela y Donald Trump,
En la película “Tony Robbins. I am not your gurú” vemos el detrás de escena del seminario "A Date With Destiny" de Tony Robbins, al que asisten cada año más de 2.500 personas en Boca Ratón, Florida.
Coaching
En los años 60 del siglo pasado, el proceso de transformación social relacionado con los avances científicos y tecnológicos y la reestructuración económica dieron origen a profundos cambios en el sistema capitalista. Surge así la sociedad del conocimiento, caracterizada por el dominio de la aplicación de conocimientos científicos.
Esta sociedad hizo del conocimiento una herramienta central y construyó una estructura productiva, política y social alrededor de él.
Aparece así la economía del conocimiento desde mediados de los años setenta del siglo pasado, generando profundos cambios en el mundo del trabajo y en los procesos productivos, obligando al sistema capitalista y a las organizaciones a crear nuevas estrategias de gestión capaces de enfrentar la nueva realidad, caracterizadas por el cambio continuo, la innovación permanente, la flexibilización productiva, la flexibilización laboral, y el surgimiento del trabajador cognitivo.
Una característica notable de esta nueva etapa consiste en que el conocimiento es inseparable de la realización del ser humano, este lleva a aquel indefectiblemente consigo, no lo puede separar; de esta forma, el trabajo invade la totalidad de la vida de los individuos puesto que conocimiento y mundo de la vida hacen parte de un todo.
Esto significa, en última instancia, que la explotación del trabajo cognitivo va más allá de los horarios laborales, ya que la obtención, producción y aplicación de conocimientos es un proceso mental continuo del ser humano.
El capitalismo adaptó sus estructuras a esa era del conocimiento y es lo que conocemos como “capitalismo cognitivo”. En el mundo de la gestión han diseñado diversas herramientas en particular el coaching, fundamental en proceso actual de acumulación de capital.
En este sentido, el coaching procura ofrecer nuevas herramientas, métodos y técnicas que puedan favorecer el desempeño, rendimiento y productividad del trabajador, a la vez de enfocarlo en la importancia de la planificación y correcta gestión del tiempo y los recursos. Busca además que tome consciencia con respecto al desarrollo del talento propio y la búsqueda de la excelencia en la conquista de objetivos.
Se conocen distintas corrientes de coaching, tanto en la esfera organizacional como en la personal. Así tenemos el coaching funcional, transformacional, ejecutivo, educativo, empresarial, cognitivo y ontológico entre otros tantos.
La corriente del coaching ontológico es muy popular en Argentina, tal vez por ser la única de origen sudamericano.
Coaching ontológico
El coaching ontológico es un método de aprendizaje que interviene sobre tres dimensiones constitutivas de la existencia humana: el lenguaje, el cuerpo y la emocionalidad. Cómo tal, es una disciplina que combina el coaching con los principios de la ontología, es decir, la rama de la filosofía que estudia el ser en cuanto tal. De allí que el coaching ontológico sea un proceso de crecimiento basado en el dominio del ser.
Su dinámica básicamente consiste en que las personas sean capaces de percibir cuál es su modo de ser, relacionarse y actuar ante el mundo. El coaching ontológico nos conecta con nuestros recursos y nuestra capacidad de gestionarlos para obtener mejores resultados y alcanzar nuestras metas, fundamentalmente la de la felicidad.
El éxito, se toma como camino de la realización individual o colectiva, orientando el discurso corporal y emocional en la persecución del cambio hacia otro modo de ser que se adapte mejor a las exigencias del capitalismo neoliberal contemporáneo.
La Lic. Vanessa Pérez Gordillo en su libro “La dictadura del coaching. Manifiesto por una educación del yo al nosotros” expresa:
La ideología coaching sólo es una, pero cada vez tiene más responsabilidad. Los coaches, esas personas que han descubierto su líder interior, que trabajan como asesores personales de grandes empresas, como autónomos que acompañan los procesos de cambio de personas insatisfechas, o como guías del alumnado de las escuelas, propagan la idea exagerada, contradictoria y condicionada de la Felicidad. Este tratamiento del Yo se basa en la idea de que si eres feliz puedes lograr lo que te propongas, no hay imposibles. Durante el trabajo, el cliente, el alumno, o el coachee, llamémoslo como queramos, llega solito a la conclusión: «Mejor sonreír que llorar». Con este estribillo en la cabeza, la persona aprende a aceptar las situaciones y a soportarlas. «Tu destino lo construyes tú» exonera de condiciones y circunstancias. El coach es un preparador de sujetos empoderados, inofensivos y útiles. El secreto de su trabajo es conseguir que el cliente se responsabilice. Ante la asunción de la responsabilidad absoluta queda fracasar o ser rentable.
[…] Nos han convencido de que aquellos que son favorecidos lo son por su actitud, y no por su condición favorable. Hemos quedado ciegos ante una sociedad que se dibuja con patrones elitistas que dejan fuera de la fórmula lo que no enriquece.