El Ministerio de Justicia y Seguridad porteño decidió agregar más de 400 policías de la Ciudad para reforzar la custodia del Superclásico que se disputará este domingo a las 17, luego de ser suspendido el sábado por los violentos incidentes ocurridos en los alrededores del estadio Monumental.

Fuentes policiales revelaron que en las últimas horas se pidieron "unos 10 uniformados promedio por comisaría", entre las 15 comunales y las 28 vecinales que hay en la Capital Federal -totalizan unos 430 policías- y a ellos habrá que sumarle algunos más de Prefectura Naval y Policía Federal para superar los 2.700 uniformados abocados a la gran final de la Copa Libertadores de América.

En ese sentido, para el encuentro del sábado hubo 1.300 efectivos entre integrantes de la Ciudad, de Policía Federal y de Prefectura Naval, y 900 empleados de seguridad privada que totalizaron unos 2.200.

Sin embargo, tras los incidentes que se produjeron el sábado, con la agresión incluida al micro que trasladaba al plantel de Boca, los funcionarios de Seguridad de la Ciudad pidieron refuerzos, los cuales superarían los 2.700 uniformados.

De esa manera, la cantidad de efectivos para este domingo por la tarde será de unos 1.800 policías, entre miembros de la Ciudad, de la Federal y de Prefectura Naval, más los 900 vigiladores privados.

Finalmente, voceros policiales explicaron los agentes afectados al River-Boca, no serán uniformados que estén afectados a la tarea diaria de vigilancia en los barrios de la Capital Federal, sino que serán aquellos que en este día están en franco de servicio.