Persiste el cortocircuito entre las cancillerías de Argentina y Chile. A los choques y cruces mediáticos ya sucedidos entre Javier Milei y Gabriel Boric, el ministro de Economía Luis Caputo generó una nueva escalada bilateral.

Inesperadamente, en una entrevista por Radio Mitre este miércoles, Caputo hacía un balance de gestión tras un año de Gobierno “libertario”. Entre otras cosas, el ministro de Economía celebró que la gente pudiera comprar dólares para irse de vacaciones al exterior, que los mercados exhiben mejores indicadores.

“Chile es el país de Latinoamérica que más gente sacó de la pobreza en los años 80 hasta el 2010, y descuidó la batalla cultural, esa que hoy da fuertemente Axel Kaiser (N.d.R: un libertario chileno)”, alimentó la polémica Caputo. 

Entonces, el ministro se decidió a hablar sobre el presidente chileno.“Hoy los gobierna prácticamente un comunista que los está por hundir”, dijo, sin poder desconocer las repercusiones que algo hacía generaría en la relación bilateral.

Este jueves el Gobierno de Chile elevó una nota de protesta al embajador en Santiago, Jorge Faurie (excanciller de Mauricio Macri). Hablar del presidente como un “comunista que los está por hundir” es un tema que los trasandinos no pueden dejar pasar.

X de Sebastián Lacunza

Para agravar el cuadro, Milei apoyó a su ministro con un mensaje en X. "PONIENDO ZURDOS EN SU LUGAR" (las mayúsculas son originales). 

“Hoy, a las 18:15 horas, el Secretario General de Política Exterior, embajador Rodrigo Olsen, entregó formalmente una nota de protesta al embajador de Chile en Argentina, Jorge Faurie, manifestando el rechazo del Gobierno de Chile a las inapropiadas e inexactas declaraciones del ministro de Economía de Argentina, Luis Caputo”, indica el texto.

Como contraste, Boric optó por no escalar en la disputa discursiva y pidió a Milei y Caputo "humildad".

"Le quiero decir al señor presidente Javier Milei que yo soy presidente de Chile y Argentina para mí y para todos nuestros compatriotas es un país hermano", empezó diciendo en un acto.

"Hay que tener un poquito más de humildad porque nosotros los presidentes pasamos pero las instituciones y los pueblos quedan. Yo no me voy a referir con adjetivos ni insultos hacia el presidente de Argentina como él está acostumbrado a hacerlo. Yo prefiero hablar en positivo", dijo públicamente el mandatario.

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