Los talibanes anunciaron que ganaron el terreno en el valle del Panjshir, último bastión de resistencia armada al nuevo Gobierno de Afganistán. Sin embargo, el Frente Nacional de Resistencia niega la versión y Estados Unidos teme que se desate una guerra civil en la región.

Según la ONG italiana Emergency, presente en el Panjshir, las fuerzas talibanas llegaron el viernes por la noche a Anabah, un pueblo ubicado a unos 25 kilómetros tierra adentro del valle, que tiene una longitud de 115 kilómetros.

"Numerosas personas huyeron de los pueblos de la zona en los últimos días", añadió la ONG en un comunicado, en el que afirmaba que atendió a "un número reducido de heridos en el centro quirúrgico de Anabah", informó la agencia de noticias AFP.

El jefe del Estado Mayor del ejército estadounidense, el general Mark Milley, consideró que "las condiciones de una guerra civil" eran "susceptibles de reunirse" en Afganistán.

"Creo que, por lo menos, hay una muy fuerte probabilidad de una guerra civil" que podría conducir "a una reconstrucción de Al Qaeda o a un refuerzo del ISIS (Estado Islámico) o de otros grupos terroristas", subrayó en una entrevista con la cadena estadounidense Fox News.