El próximo domingo 27 de octubre, como en Argentina, Uruguay acude a las urnas para sus elecciones presidenciales.

En ese mismo proceso electoral, los uruguayos deberán votar también por el plebiscito “Vivir sin miedo” que busca reformar la Constitución en materia de seguridad.

La iniciativa es impulsada por el senador Jorge Larrañaga, del conservador Partido Nacional, para militarizar la seguridad interna, creando una Guardia Nacional integrada por 2 mil soldados, habilitar los allanamientos nocturnos, endurecer las penas, instaurar la prisión perpetua revisable y eliminar beneficios liberatorios por buena conducta o estudio.

Larrañaga dijo recientemente en declaraciones a la prensa que se trata de un "instrumento importante que va a servir al país, pues no puede haber desarrollo económico, humano y social si no hay paz pública, si no hay convivencia", al tiempo que añadió que la gente está cansada de la inseguridad y "quiere decir basta".

Este martes pasado, se realizó una concentración en la explanada de la Universidad de la República para luego iniciar la marcha por 18 de Julio que finalizó en la plaza Cagancha.

La movilización, que convocó a 55 mil personas, culminó con la actuación del músico Rubén Rada, bajo la consigna “¡Marchemos: que el miedo no te coma!”.

Durante la marcha se pudo leer algunas pancartas en las cuales se expresaba, entre otras cosas: “No a la militarización de América Latina” o “La lucha colectiva moviliza lo que el miedo paraliza”.

Daniela Buquet, una de las voceras de la Articulación Nacional No a la reforma, declaró en diario El País que el motivo que los motiva a oponerse a la medida "principalmente tiene que ver con que estas medidas son medidas que se vienen haciendo en el país hace muchísimo y lo único que dan son fracasos. El delito no para de aumentar, la gente privada de libertad tampoco, pero la sensación de inseguridad tampoco. Entonces, por qué seguir por un camino que es conocido, que sabemos que no funciona y además, entender también que si el Estado lo que plantea es que su primera herramienta es la represión, es un problema porque se genera que esto se vuelva peligroso y la violencia va a seguir aumentando".

"Las Fuerzas Armadas tienen la misión de salvaguardar la soberanía nacional, su cometido no es la seguridad interna, para eso está la policía. ¿Por qué no mejorar entonces la policía?", se pregunta Buquet, dijo Buquet en eldiario.es.

Respecto a los allanamientos nocturnos, Buquet sostiene que es un "dispositivo muy complejo y violento" incapaz de combatir las grandes redes de narcotráfico. "En realidad lo que se debe controlar son las aduanas y cómo se financian los grandes narcotraficantes", señala.

En cuanto al sistema penitenciario uruguayo, la activista no dudó en tildarlo, en ese medio, de "fracaso total" y asegura que en las cárceles del país hay una vulneración de los derechos humanos, pero en cualquier caso, añade, la solución no pasa por aumentar las penas a las personas privadas de libertad.

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