Tomas Eliaschev: "El desafío es seguir buscando el espacio para el delirio"
El programa Otro Siglo dialogó con el periodista especializado en animación Tomás Eliaschev. Educación, diversidad e industria nacional fueron los tópicos de una entrevista super amena que recorrió grandes animaciones del todos los tiempos.
Otro siglo dedicó un programa a hablar sobre el maravilloso mundo de ayer y hoy de los dibujos animados. Para ahondar sobre este universo dialogaron con Tomás Eliaschev, un experto en la materia que compartió sus puntos de vista sobre la educación, la diversidad y los desafíos que enfrenta esta industria en Argentina y en el mundo.
“El dibujo animado puede educar, pero no es necesariamente su misión fundamental," expresó Tomás, destacando que aunque la educación es un aspecto importante, los dibujos animados también tienen la tarea de entretener y cautivar a su audiencia diversa: “hay que acabar con la visión de que los dibujos son solo para les niñes”.
En este sentido es que habló de "Las asombrosas excursiones de Zamba y Nina", según él, este programa es un ejemplo de cómo se puede lograr un equilibrio entre el entretenimiento y la educación, y cómo la industria local puede desempeñar un papel fundamental.
La conversación se adentró en los cambios y desafíos en la industria de la animación. "Hay casos, como por ejemplo la película de vos, Light Gear, que salen dos mujeres besándose y de repente las personas enloquecen y van a cancelar funciones al cine," planteó Tomás, subrayando cómo algunas representaciones desatan controversias y reflexiones sobre la sociedad actual.
Ver: Autoritarismo y la desconexión política: los desafíos de la democracia contemporánea
En relación a esto compartió anécdotas y reflexiones sobre cómo los dibujos animados influyen en la percepción de la sociedad, desde la imagen de los padres en "Peppa Pig" hasta los clásicos cuentos de hadas que evolucionan con el tiempo. Resaltó la importancia de la diversidad y la representación en los dibujos animados, subrayando que estos programas pueden ser poderosas herramientas para la construcción de valores y la promoción del respeto.
Para él "se suele decir que los dibujitos de antes no tenían estas cosas y en realidad sí las tenían, más en el plano del absurdo, de lo políticamente a veces muy incorrecto, porque también había estereotipos racistas, cosas que son inadmisibles hoy en día o que por lo menos exigen una reflexión"
En cuanto a la producción de dibujos animados en Argentina, expresó su optimismo sobre el potencial que tiene el país para destacarse en este campo. Mencionó la rica historia de animación en el país, desde la primera película animada en 1917 hasta figuras como García Ferré. Sin embargo, señaló que aún falta un mayor apoyo estatal y privado para que la producción nacional pueda masificarse y competir a nivel internacional, resaltando la necesidad de un mayor compromiso por parte de todos los sectores para impulsar los proyectos de animaciones nacionales y destacó que la colaboración entre el sector público y privado puede ser clave para el éxito.
“Si nosotros seguimos educando a nuestros hijos, a nuestras hijas, con la idea de que el castillo de Disney, siempre vamos a sentirnos que estamos un poco afuera… por suerte el castillo de Disney es cada vez más copado” señaló.
La conversación concluyó con una mirada esperanzadora hacia el futuro de la animación en Argentina y en el mundo. Tomás expresó su confianza en que la industria continuará evolucionando y desafiando las normas establecidas, y señaló que el talento y la creatividad local tienen el potencial de brillar en la escena internacional.