Posiblemente haya un esbozo en la mañana de este martes, cuando Carla Vizzotti encare lo que desde Casa Rosada se sostiene como "un nuevo espacio de comunicación semanal con la prensa" de parte de la ministra de Salud.

Pero es una decisión tomada: los afiliados del Programa de Atención Médica Integral (PAMI) tendrán "su propia fila" en la vacunación contra el coronavirus.

Lo confirmó la directora ejecutiva del programa, Luana Volnovich, a través de su cuenta de Twitter. "El presidente Alberto Fernández se comunicó con nosotros para que PAMI colabore con la campaña de vacunación en las provincias en donde el riesgo epidemiológico es más alto", escribió. 

Volnovich señaló que ya trabajan junto al Ministerio de Salud y los pasos a seguir serán comunicados "en los próximos días".

SERÁN REPARTIDAS EN TODO EL PAIS

El presidente Alberto Fernández lo había mencionó tras una charla con Horacio Rodríguez Larreta, días atrás. El tweet de la titular del organismo pareció verse forzado a mencionar al Jefe de Gobierno porteño. La puja política encontró en el argumento de ser el distrito con mayor cantidad de jubilados una presunta solución.

Se sabe que el proceso de inmunización tiene allí, en el máximo centro urbano del país, las mayores deficiencias. Desde el otorgamiento de casi diez mil dosis a obras sociales y clínicas privadas, pasando por largas esperas al sol y hasta las dificultades de quienes quisieron inscribirse.

Hasta Hugo Moyano confirmó que tanto él como su hijo Jerónimo, de 20 años, se vacunaron en la Clínica Aconcagua, propiedad del Sindicato de Camioneros y administrada por su esposa.

Las autoridades porteñas se negaban a otorgar dosis al PAMI para que las administre como ocurre, por caso, en la provincia de Buenos Aires. Pero ahora habrá partidas específicas.

Las mismas serán repartidas en todo el país, por lo que se trabaja en otra metodología de distribución en todas las provincias.