Denuncian casos de violencia obstétrica en la cárcel de Bouwer
El Tribunal Superior de Justicia dio lugar a un hábeas corpus correctivo y colectivo. El fallo destaca "las situaciones de humillación y maltrato" de las mujeres que darán a luz y se encuentran alojadas en el penal.
El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Córdoba hizo lugar a una acción de hábeas corpus por violencia obstétrica en la cárcel de mujeres de Bouwer.
Originalmente, el Juzgado de Ejecución Nº 1 había rechazado el recurso de casación en marzo de este año. Sin embargo, la Sala Penal del TSJ dio lugar al recurso y cuestionó al juzgado por la falta de entrevistas a las reclusas antes de fallar.
"Se denunció violencia obstétrica. No solamente en relación a ella sino en relación a muchas compañeras que ya habían dado a luz y otras tantas que estaban por ser madres", expresó la defensora oficial, Alfonsina Muñiz.
Y agregó: "En el fallo se destaca las situaciones de humillación y maltrato de estas mujeres".
El hábeas corpus es colectivo y correctivo.
"Ojalá que estos contribuya a que no se genere más situaciones de violencia obstétrica en contextos de encierro", remarcó la abogada.
Víctimas de violencia obstétrica e institucional
Para dictaminar el hábeas corpus, el TSJ realizó una serie de entrevistas entre las internas de la cárcel y recabó varios hechos de violencias.
“El día 13/11/2021 rompí bolsa mientras estaba en el pabellón, llegué al hospital varias horas después, acompañada por una médica del servicio y una enfermera”, expresó una interna.
Además de demoras en el traslado, otras reclusas denunciaron falta de acompañamiento; utilización de medidas de sujeción antes, durante y después del parto; violación a la privacidad e intmidad; discriminación y falta de discriminación y consentimiento sobre prácticas médicas.
"Mientras estuve internada, antes de la cesárea y después estaba encadenada o del pie, o de la mano, la esposa estaba muy ajustada y me lastimaba la piel, me cortaba la circulación. No me podía mover más que para sentarme en la cama", contó otra reclusa.