Especialista afirma que será difícil prever con precisión los fuegos en Córdoba
El biólogo, investigador del Conicet, indica que la provincia es demasiado extensa como para controlar totalmente cada nuevo foco.
Los cortafuegos son una de las estrategias que utilizan los equipos del Plan del Manejo del Fuego de Córdoba para frenar el avance de las llamas sobre la localidad de Caminiaga. Eso, sumado a la acción de los autobombas, aviones hidrantes e imágenes satelitales no alcanzan para frenar las llamas, que afectan al norte cordobés.
¿La ciencia tiene instrumentos para prevenir este tipo de sucesos? Pedro Jaureguiberry, doctor en Ciencias Biológicas e investigador del Conicet, indicó que no hay herramientas con la magnitud necesaria. "El fuego es fruto de muchos factores que requieren de un abordaje integral. Se toman medidas localizadas, pero están faltando puntos claves de prevención", manifestó.
Drama Mundial
El cambio climático y la voraz actividad humana han colaborado para que este tipo de fenómenos se tornen incontrolables. Sólo la llegada de las lluvias es garantía total de la extinción de los fuegos más destructivos.
Los casos más paradigmáticos de los últimos meses se produjeron en California y en España. En Málaga los expertos en la "ecología del fuego" han creado el concepto de “generaciones”, para referirse a la evolución de los incendios en función del cambio de las condiciones del paisaje y del clima. Para ellos, los incendios forestales tienen dinámicas y un escenario diferente: Si cambia el paisaje y el clima, cambia el comportamiento del fuego.
"En ningún lugar se ha resuelto definitivamente este problema. Hay factores, como el clima, la vegetación y ciclos, junto a costumbres históricas o el uso de la tierra que influyen", indicó Jaureguiberry, quien está seguro de que la extensión de la provincia dificulta el control exhaustivo.