La historia de Rubén Giménez encendió la preocupación por el complejo derrotero que debió afrontar desde que buscó asistencia hospitalaria, con marcados síntomas y afectado de coronavirus, hasta que finalmente logró la internación. Tiene 64 años, padece obesidad mórbida, diabetes e hipertensión.

La dolorosa imagen de Rubén sufriendo los efectos del Covid-19 y esperando horas en una sala de emergencias causaron conmoción. “A mi papá no lo querían ahí”, dice con malestar Federico, hijo de Rubén, en referencia a las horas que su padre estuvo en una sala común de la Clínica Aconcagua.

EL CASO: Tiene coronavirus y deambulaba buscando cama de internación

Y, en diálogo con Canal 10, repasa lo vivido entre la noche del martes y la jornada del miércoles, cuando incluso fueron derivados a otra clínica en la que tampoco encontraron cama para finalmente conseguirla en el primer establecimiento.

Federico valora la difusión del caso y estimó que si no se viralizaba no sabe cuál podría haber sido el desenlace: “Si no hubiera sido por la nota que subieron en cba24n.com.ar no sé qué hubiera pasado”.

LA INTERNACIÓN: Finalmente, internaron al hombre que deambulaba buscando cama

En ese marco, dijo que desde la Clínica Aconcagua lo llamó la responsable de Terapia Intensiva, "la Dra. Guzmán", quien aseguró que ella no le notificaron de la demanda de cama que ellos habían practicado. Mientras tanto, dice no haber sido llamado ni por directivos ni otro miembro del personal de ese centro de salud.

Pese a todo, valoró que su padre haya podido encontrar un espacio de internación y destacó: “Mi papá por suerte está estable. Tiene un estado delicado por otras afecciones que tiene pero lo que sería Covid está controlado. Por suerte no está intubado, no tiene respiración mecánica”.