“Ninguno de nosotros quisiera frenar la presencialidad, pero no podemos no hacerlo”, dijo el presidente Alberto Fernández en la conferencia de prensa que brindó al finalizar la cumbre con Rodríguez Larreta. 

De esa manera ratificó la decisión de pausar por 15 días la presencialidad en AMBA. Admitió que tomó la decisión “aún a pesar” de la oposición de algunos de los ministros. 

El presidente explicó que la curva de contagio creció “drásticamente” desde que comenzaron a dictarse clases presenciales. "Los datos científicos dan cuenta que el problema no ocurre en los colegios sino que detrás de la presencialidad de alumnos se genera todo un movimiento social que incrementa mucho la circulación ciudadana", agregó. 

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Dijo además que la Corte Suprema de Justicia no es el ámbito para resolver estos conflictos. Se refería a la acción declarativa de inconstitucionalidad presentada esta mañana por Rodríguez Larreta, para mantener las clases presenciales. 

"Nuestra idea es reducir drásticamente la circulación en las próximas dos semanas. Eso le expliqué al jefe de Gobierno", dijo Fernández en rueda de prensa en Olivos tras el encuentro de más de una hora con el titular del Ejecutivo porteño, en la que agregó que su decisión "no es un acto de altanería ni prepotencia".

Este viernes, el presidente y el jefe de Gobierno mantuvieron una reunión en la que ambos expresaron sus posturas y ninguno cedió. Fernández dijo que mantendrá el DNU y Rodríguez Larreta irá a la Corte Suprema.