Mitos y recomendaciones para prevenir las mordeduras de yarará
El Hospital de Niños registró tres casos de niños mordidos por los ofidios.
Con la llegada del calor, aumenta la población y la actividad de animales ponzoñosos.
Se han registrado esta semana 3 casos de niños y una mujer mordida por yarará.
Ante el aumento de incidentes, el Gobierno de Córdoba brinda varias recomendaciones.
Las yarará son las víboras ponzoñosas más comunes en la Provincia.
Son de hábitos nocturnos y crepusculares y viven en climas cálidos o templados con regímenes de lluvia.
Las yarará pueden ser de variedad chica, grande y ñata. Otras especias comunes en Córdoba son las de cascabel y coral.
El Programa de Zoonosis del Ministerio de Salud de la Provincia recomienda:
– Al caminar por el campo, usar ropa y calzado adecuados. No levantar o mover piedras y troncos con manos y pies desprotegidos.
– Si se las encuentra, no acercarse a ellas ni hacer movimientos bruscos. Tampoco tocarlas.
– Mantener limpio el espacio alrededor del domicilio.
– Informarse sobre ellas para así poder reconocerlas, y aconsejar y cuidar a los niños.
La jefa de Toxicología del Hospital de Niños Nilda Gait (MP 13283) explicó qué hacer ante una mordedura de víbora.
"Hay que lavar bien la mordedura con agua y jabón. Dejar inmóvil el miembro y concurrir al centro médico más cercano", contó.
La mordedura de yarará provoca una lesión violácea que puede tornarse más oscura. Genera problemas de coagulación, hemorragias y lesiones a nivel neurológico.
Sobre la disponibilidad de sueros, Gait dijo: "la Dirección de Epidemiología tiene la capacidad de proveerlos para todos los hospitales de la Provincia".
Además, aclaró que todos los hospitales cuentan con al menos una dosis. En caso de gravedad, los médicos decidirán una derivación a un centro de mayor complejidad.
Gait también salió a desmentir algunos mitos populares sobre la mordedura de ofidios.
- No aplicar torniquetes. El torniquete acumula el veneno en la herida, al restaurar la circulación puede generar mayor daño.
- No succionar el veneno. La jefa de Toxicología dijo que no es efectivo y que la persona que succiona absorbe mediante la mucosa bucal el veneno.
-No consumir alcohol. Para aliviar el dolor, mucha gente consume bebidas alcohólicas. la médica no recomienda la práctica y aconsejó tomar agua.