Una capilla y un convento del siglo XIX ocultos en el corazón de Sierras Chicas
Tienen más de 150 años de antigüedad y pertenecen a la orden de los Dominicos. Con imponente arquitectura, sobresalen en medio de las sierras, a un costado del Camino del Cuadrado. Se encuentran a apenas 40 minutos de Córdoba Capital.
Quienes han visitado las Sierras Chicas de Córdoba habrán escuchado hablar varias veces de La Estancita. Es que, el “salto” o cascada, con una caída de 13 metros que hay en el relieve del lugar, es un clásico de paseos y caminatas por la zona. Sin embargo, un camino alternativo en la zona lleva a otro lugar asombroso: la Capilla de la Candelaria.
El lugar pertenece a la orden religiosa de los Dominicos, o “la orden de los predicadores”, y data de mediados del siglo XIX. Esta capilla y el convento han sido declarados “Patrimonio Histórico-Cultural de la localidad de Salsipuedes”, conjuntamente con otros espacios, en el marco de las acciones para preservar el paisaje cultural de esa localidad.
Una imponente capilla y convento, testimonio de la “orden de los predicadores”, en plenas Sierras Chicas
Posicionarse frente a esta capilla es una experiencia inigualable, pues, es una invitación a un viaje imaginario al siglo XIX, para comprender cómo puede encontrarse tan majestuosa estructura, en medio de las sierras.
“El terreno fue comprado en el año 1864 por los padres Dominicos y la construcción data del año 1870, conjuntamente en esa misma época se edificó el Convento de Santo Domingo de la ciudad estando a cargo de la Orden de Predicadores de los padres Dominicos el prior fray Reginaldo Toro”, explicó a cba24n.com.ar Susana Veronesi, quien trabaja conjuntamente con los padres dominicos en la actividad religiosa y el cuidado del lugar.
Tanto la Capilla de la Candelaria, o Capilla de Santo Tomas de Aquino, como el convento de los Padres, explica Susana, “fueron construidas por la gente del lugar, quienes colaboraron en la mano de obra y donaciones para los materiales”.
En ese marco, destaca que “la construcción se realizó con materiales de la zona, como la cal extraída de las canteras del lugar, los tirantes de álamos, adobe y paja”.
Y la elección del lugar, con esas vistas maravillosas que ofrecen nuestras sierras, no es al azar, es que “la casa de los padres se solía usar para retiros de los noviciados y descanso de veraneo de los padres dominicos”, agregó Susana.
Es por eso que la iglesia está acompañada por una extensa edificación contigua, con habitaciones e instalaciones aptas para alojar a los padres en retiros espirituales o, más frecuente en la actualidad, para cuando vienen padres de otras provincias a misionar.
La Virgen de la Candelaria, tradición, fiestas patronales y festividad
Con el mismo nombre que se conoce a la capilla, esta virgen es venerada en ese espacio. Su festividad se concreta con una celebración que se realiza todos los días 2 de febrero.
“Es una fiesta patronal que comienza con un triduo (conjunto de ritos o celebraciones religiosas que dura tres días) donde se reza el rosario y misa, el último día, osea el 1 de febrero después de la misa, se preparan para la procesión de antorchas precedida por el sacerdote y seguida por los feligreses”, explicó Susana.
Y afirma que “dicha procesión se guía por el cerro rezando el santo rosario donde recorren el vía Crucis y contemplan las imágenes de Cristo crucificado, en el sepulcro y la virgen de la piedad, se llega hasta la cima del cerro en donde está la ermita con la imagen de Nuestra Señora de Fátima, construida por el padre Breatori, con la colaboración de la familia Sanmillan en el año 1947, donde el sacerdote dice unas palabras, se reza a la virgen y regresan bajando del cerro cantando”.
Esta procesión es siempre motivo de encuentro y tradición de las familias del lugar, según comenta. De este modo, la celebración culmina el día 2 de febrero con misa por la mañana, bendición de las candelas y se realiza la procesión con la Virgen del Rosario del Milagro por el cerro, acompañada por las agrupaciones gauchas vestidas con sus mejores atuendos y feligreses provenientes de distintos lugares en autos y colectivos, toda la gente del lugar y allegados a los padres colaboran para que sea un gran día de fiesta.
Dónde queda y cómo se llega a esta Capilla
Este verdadero monumento histórico y religioso se encuentra en La Estancita, zona que pertenece a la jurisdicción de Salsipuedes. Sin embargo, el acceso es por el Camino del Cuadrado, específicamente en donde se encuentra el puesto de la Policía Caminera. Desde la Rotonda de la ruta E-53, a la altura de Río Ceballos, son apenas 10 kilómetros hasta llegar a este puesto policial que está instalado de manera permanente sobre el Camino del Cuadrado.
Desde allí, hay que ingresar por un camino de tierra a la derecha y en menos de un kilómetro hay que estacionar el vehículo, para luego seguir de a pie. Hay que caminar menos de un kilómetro por una calle en buenas condiciones.
Al predio y a la iglesia no es posible llegar en auto. Aunque hay calles que conectan con ella, la Municipalidad de Salsipuedes insta a los visitantes a dejar vehículos motorizados en una zona que habitualmente se destina a tal fin y luego caminar. Desde el área de Turismo explicaron a cba24n.com.ar que se busca promover un turismo amigable con el medioambiente. En ese contexto, se han vuelto muy frecuentes en la zona las visitas de quienes practican mountain bike o el trekking.
Hay que recordar que La Estancita está inserta en la Reserva Natural Municipal Salsipuedes y por ello se promueve un turismo amigable con el medioambiente, el bosque y la fauna nativa. Incluso no hay señal de telefonía, por lo que es una verdadera invitación a conectar con la naturaleza. No obstante, las autoridades y guardaparque tienen mecanismos de comunicación capaces de dar respuesta ante una emergencia.
Actividades y misas: cómo y cuándo se puede conocer la Capilla
A la iglesia se puede llegar cualquier día del año. Pero, a continuación se ofrecen una serie de recomendaciones para aprovechar mejor la visita. Es que, la mayoría de días la capilla tiene las puertas cerradas, por lo que una visita aleatoria podría permitir solo conocer el predio, lo que igualmente es una experiencia inigualable.
Por fuera de las fiestas patronales del 2 de febrero, en esta capilla se realizan distintas actividades. “Se celebran bautismos, casamientos, comuniones y en la actualidad misa los segundos sábados de cada mes”, remarca Susana. Este último dato es clave si el objetivo es conocer la iglesia por dentro.
Por fuera del edificio se puede recorrer los jardines, las imponentes galerías laterales y del convento, y el predio contiguo donde se encuentra el viacrucis y una ermita que se encuentra al finalizar el mismo.
En rigor, además de las visitas por los caminos señalados, esta iglesia es muy visitada por quienes, desde distintos puntos de la montaña, llegan en distintos circuitos favoritos del trekking y las caminatas.