Usar redes públicas de WiFi en vacaciones y no poner en riesgo tus datos
Un momento de amenaza a la seguridad de nuestros datos se produce en el verano cuando aumenta el uso de redes de WiFi en espacios públicos como aeropuertos, terminales de ómnibus, hoteles, cafés, bares y restaurantes.
De hecho, según el estudio "El rompecabezas imposible de la ciberseguridad", una encuesta realizada en junio de 2019 por Sophos, el principal mecanismo de ataque cibernético se realiza a través del correo electrónico.
Navegar por Internet también es un importante factor de riesgo, ya que es el medio responsable por 3 de cada 10 ataques.
Por otra parte, el estudio también reveló que el 36% de los equipos de TI consideran a las redes inalámbricas no seguras como una de las tres principales preocupaciones.
Las formas de ataque, en general, son: MITM (o “man in the middle”), que se refiere a la intercepción de una comunicación por parte de un tercero que se coloca entre el emisor y el receptor del mensaje; conexiones falsas de Wifi, Sidejacking (cookies de terceros) o incluso software de captura de paquetes de datos.
“En general, las redes públicas están abiertas, sin la protección de una contraseña y sin cifrado de la información que se transmite a través de ellas, por lo que no son seguras. Y por otro lado, suelen tener a muchas personas conectadas simultáneamente, por lo que es importante estar conscientes de que al conectarnos, estamos accediendo a una red en la cual no tenemos el control de lo que se está transmitiendo a través de ella, ni quienes están conectados.”, afirmó Leonardo Granda, Gerente de Ingeniería de Ventas en Sophos para Latam.
Al respecto, el especialista de Sophos brinda una serie de consejos a tener en cuenta en el momento en que debamos, como usuarios, a conexiones WiFi públicas con todos los tipos de dispositivos (notebooks, tablets y/o smartphones):
- No acceder a las cuentas bancarias, realizar compras o introducir datos sensibles en sitios o formularios.
- Al acceder al correo o redes sociales, hacerlo siempre desde una conexión cifrada SSL, que permite el acceso cifrado a una web en su barra de direcciones (son las que empiezan con https:// y no http://).
- Instalar un firewall y un antivirus que se actualice diariamente, como forma de prevenir el acceso de terceros y/o malware.
- Deshabilitar procesos de sincronización y/o actualizaciones del dispositivo mientras se utiliza la red pública.
- Tras cerrar sesión, desconectar el dispositivo de la red pública y eliminar los datos de la red memorizados por nuestro equipo.