Gazzaniga, el arquero argentino de Girona se lució atajando tres penales
El equipo catalán, que triunfó 2-1 en la 9a fecha de La Liga con un gol en tiempo de descuento, tuvo una actuación descollante del guardavalla santafesino
Sin la popularidad de otros arqueros argentinos que compiten en Europa, Paulo Gazzaniga (32 años), que nunca jugó en nuestro país, continúa haciendo ruido en el Viejo Continente. Nacido en Murphy, Santa Fe (la misma ciudad de la que es oriundo Mauricio Pochettino), el guardavalla de 1,96 metro es, desde hace tiempo, una referencia de Girona, el modesto club español que la temporada pasada dio la grata sorpresa en España al terminar en la tercera posición de La Liga, detrás de los gigantes Barcelona y Real Madrid (finalmente, el campeón).
Hijo de Daniel Omar Gazzaniga, exarquero surgido en River en la década de los 80, Paulo es una garantía para sus compañeros; los defensores de Girona descansan en él. Así lo volvieron a hacer durante este domingo, en el agónico triunfo por 2-1 ante Athletic Club de Bilbao, en el estadio Montilivi de la ciudad de Girona, por la novena fecha del campeonato español. Gazzaniga detuvo tres penales en el partido, aunque uno de ellos tuvo que ser repetido porque el argentino se había adelantado.
En 60 minutos de partido, le cobraron dos penales en contra a Girona, el equipo dirigido por Michel. El primero fue a los 28 minutos del primer tiempo: Álex Berenguer, habitualmente un pateador confiable, lo ejecutó bajo hacia la izquierda del arquero, sin embargo éste se arrojó con rapidez y lo detuvo. El siguiente penal fue en el comienzo de la segunda parte y lo pateó Iñaki Williams: Gazzaniga lo detuvo, pero el árbitro entendió que el santafesino se había adelantado y decidió que se repitiera el lanzamiento. El Athletic Club modificó al ejecutor: esta vez Ander Herrera se hizo cargo, pero Gazzaniga también detuvo el tiro (la pelota fue al medio y la rechazó con las piernas).
Girona, finalmente, terminó ganando el partido con un tanto agónico, en el último suspiro, en el noveno minuto de descuento, con un penal anotado por el uruguayo Christian Stuani que el arquero mexicano Álex Padilla estuvo cerca de sacar.
No es la primera vez que Gazzaniga se luce en un penal. El miércoles pasado, por la Champions League, Girona perdió como local ante Feyenoord por 3-2, sin embargo el arquero argentino también detuvo un penal, en esa ocasión ante el delantero japonés Ayase Ueda del equipo neerlandés. Este domingo, frente al Bilbao, La Liga eligió a Gazzaniga (con cuatro atajadas) como el Hombre del Partido.
“A mis hijos les digo que en la vida hay que saber esperar, que tengan humildad y respeto. Para ser arquero hay que estar un poco loco, si no tenés un grado de locura no podés estar bajo los palos”, declaró hace unos años Gazzaniga padre en el Diario de Almería. Paulo tiene un hermano menor, Gianfranco, que atajó en el ascenso español.
En 2018, cuando estaba en Tottenham -mayormente era suplente-, Gazzaniga fue convocado en los comienzos del ciclo de Lionel Scaloni. Acredita una presencia en el seleccionado argentino: en noviembre de 2018 reemplazó a Gerónimo Rulli en la última media hora del triunfo 2-0 sobre México en un amistoso. Se formó en el fútbol base de Valencia y tiene pasos por Gillingham (ascenso inglés) Southampton, Rayo Vallecano, Fulham, Tottenham y Elche. Hoy defiende -y muy bien- la camiseta de Girona: con el triunfo ante el Bilbao se ubica undécimo en La Liga, con 12 puntos (Barcelona y Real Madrid tienen 21).