Súper Rugby Américas: en el debut, Dogos XV cayó en la última jugada
El defensor del título cayó en la última jugada contra Peñarol en Montevideo por 29-28
En líneas generales, el conjunto cordobés dominó la primera parte principalmente por saber aprovechar las pocas oportunidades con la que contó para sumar, lo cual vino acompañado de buenas combinaciones entre sus jugadores y una notable autoridad para asentarse en campo contrario. Así, Agustín Moyano y Boris Wenger apoyaron un try cada uno.
Al mismo tiempo, a Peñarol le costó bastante quebrar la monotonía en la que durante varios tramos entró el partido por la férrea disputa en el contacto y el uso excesivo de kicks. De todas formas, si bien en el cuerpo a cuerpo no logró sacar ventaja, Bautista Farisse apareció justo antes del descanso para, con una excelente maniobra individual, acercar a su equipo en el marcador y sellar el 14-7 parcial.
En el complemento, el Carbonero de entrada fue capaz de doblegar esfuerzos en esos aspectos en los que tanto hincapié hizo en el primer tiempo, y de entrada apoyó de la mano de Juan Rodríguez Balbi. A partir de ese momento, el encuentro se abrió muchísimo más, lo cual derivó en un entretenido ida y vuelta en el que ambos equipos lograron puntuar.
En este mencionado contexto, Manuel Diana y Facundo Facciolo sellaron una conquista cada uno para Peñarol, mientras que en el medio, Aitor Bildosola hizo lo propio para los dirigidos por Nicolás Galatro. De cualquier forma, la ventaja ya había pasado a manos manya, por lo que Dogos XV debió contrarrestar a una defensa rival que, para ese momento, a estaba bastante acomodada en la cancha.
No obstante, ya a pocos minutos del cierre, la visita volvió a mostrar su mejor versión, esa que había tenido en el inicio del partido, y con un gran empuje colectivo volvió a revertir el score gracias a nuevamente Agustín Moyano.
Sin embargo, en la última acción del duelo, este tan destacado poderío físico de Peñarol, que fue el que en un momento lo volvió a meter en la disputa, coronó todo el esfuerzo a través de Joaquín Myszka, el encargado de declinar definitivamente la balanza para el lado local.