Los desafíos del aula: entre los procesos de aprendizajes y la desigualdad social
La pandemia impactó en las escuelas, pero la crisis educativa existe desde antes de la llegada del coronavirus. ¿Qué sistema educativo necesita Argentina? ¿Alcanza con saber lengua y matemática? En Redacción Abierta, un debate profundo con especialistas.
La pandemia reavivó la discusión sobre la calidad y la metodología educativa. Sin embargo, en nuestro país los problemas en el sistema educativo preceden al Covid-19.
Diferentes relevamientos, entre ellos el informe que realizó el Observatorio Argentino por la Educación, advierten sobre el desgranamiento y los bajos aprendizajes en las trayectorias escolares.
En un nuevo programa de Redacción Abierta se abordó el tema con Mónica Lungo, educadora popular y fundadora de la Escuela Alegría Ahora; Gerardo Bernardi, Secretario General de SADOP; Gabriela Catri, analista del Observatorio Argentinos por la Educación; y Nicolás Trotta, exministro de Educación de la Nación. Todos coincidieron que en Argentina el factor que más afecta a la educación es la inequidad social y económica.
“La desigualdad está relacionada con las posibilidades culturales y de poder evolucionar en términos de aprendizaje de los niños de familia que están preocupadas por el día a día, porque aquellos que viven en contextos vulnerables son chicos que están pensando en otras cosas”, dijo Gerardo Bernardi desde los estudios de Canal 10.
"Si queremos hablar seriamente de educación, no podemos decir que en pandemia se estuvo educando, porque en los contexto de extrema pobreza no fue así. Tengo estudiantes que no saben ni su DNI, ni las calles de Córdoba. Una hora más de clases no garantiza una buena educación ni que estemos enseñando. Tenemos que sincerarnos, sino no podremos dar una buena solución", sostuvo Mónica Lungo.
En el mismo sentido, se expresó Nicolás Trotta vía Zoom: “El gran desafío que tiene la sociedad es superar la desigualdad que se manifiesta en las infancias y adolescentes. A la escuela que queremos para este siglo 21 tenemos que enmarcarla en esta realidad". Para el exministro es “igual de importante lo que pasa en las aulas como en nuestras casas”.
UNA CRISIS PROFUNDA
Gabriela Catri es integrante del Observatorio Argentinos por la Educación, el cual acaba de presentar el informe “Desgranamiento y aprendizajes desiguales: las dos caras de la misma moneda”. En el estudio relevaron cuántos chicos llegan al final del trayecto educativo en el tiempo teórico esperado y cuántos llegan con aprendizajes satisfactorios.
“De 100 que arrancan primer grado, sólo 16 finalizan sus estudios en el tiempo esperado y con conocimientos satisfactorio en lengua y matemática. Todos los datos arrojados son preocupantes porque hay siete provincias que tienen menos de 10 chicos cada 100, pero en los extremos superiores, a las jurisdicciones que les va mejor, como Buenos Aires que alcanza 33 estudiantes y Córdoba con 24, tampoco son números tan alentadores. Además, cada lugar tiene experiencias muy diferentes”, explicó la analista en conexión por Zoom.
"Es abrumadora la deserción luego del 2020 y 2021. Estamos viviendo una crisis humanitaria, social, política y económica que obviamente repercute en las escuelas, pero las escuelas no somos las responsables de la crisis, al contrario, nos hacemos cargo de contener y acompañar. De lo que sí somos responsables es de decir la verdad, lo que realmente está sucediendo en las aulas y yo no veo que la docencia esté reflejando las graves situaciones sociales con las que los estudiantes llegan a las escuelas", manifestó Lungo,
“Hoy tenemos escuelas del Siglo 19, docentes del 20 y una realidad del 21. Todavía no hemos analizado cómo integrar estas tres definiciones de los miembros que componen el sistema. Hay que refundar la escuela y hacer un pacto social tripartito donde participe el Estado, la escuela y las familias", señaló el representante del Sindicato Argentino de Docentes Privado.
Para Trotta no alcanza sólo con la inversión en educación, sino que es necesario discutir qué aprendizajes y qué escuela son necesarios para esta actualidad. “Hay que generar políticas que nos trasciendan porque el sistema educativo no da respuestas de un día para otro. Son procesos largos, debemos darle continuidad a esas decisiones mas allá del cambio de color político, tanto a nivel nacional como en las provincias. Que cambien los gobiernos pero que no cambie la prioridad de un agenda educativa que permita que las escuelas formen a los ciudadanos del futuro y que puedan romper la realidades de profunda iniquidad”, argumentó.
Además, el exministro y el Secretario General del SADOP coincidieron en que, entre las transformaciones necesarias, deben modificarse los institutos de formación docente y mejorarse los salarios del sector para estimular la profesión. “Los maestros deben prepararse para las aulas heterogéneas de hoy”, dijo Bernardi por la pantalla del 10.
LA ESCUELA VIRTUAL
Uno de los cambios que introdujo la pandemia en las escuelas es la incorporación de la virtualidad para suplir la presencia en el aula durante la cuarentena.
Para Bernardi es un complemento de la presencialidad, mientras que para Lungo las herramientas digitales han provocado más exclusión. “Durante 2020 y 2021, en los contextos de pobreza no se dio clases, porque no tienen conectividad y una fotocopia de vez en cuando no es educación", comentó la fundadora de la Escuela Alegría Ahora.
“Nuestra tarea ahora es revisar metodologías, procesos, nuevas formas de aprendizajes, reformas de la currícula oficial. Pero también tenemos que aprender a aprender, no sólo contenidos, sino aprender para la vida”, opinó Bernardi.
Por su parte, la educadora popular concluyó: “En todas las escuelas de las diferentes clases sociales nos tendríamos que estar ocupando de por qué se produjo una pandemia y por qué se profundizó la injusticia social. Dentro de las escuelas tenemos que soñar qué mundo queremos, crear un pensamiento humanista y no naturalizar la desigualdad”.