El gobierno nacional cerró con éxito el canje con los acreedores privados, hecho que amerita un repaso de datos de opinión pública. En marzo pasado, la consultora Analogías detectó que un 49,2% de los argentinos creía que el gobierno tendría éxito en la renegociación vs 24,2% que era pesimista (gráfico abajo).

El optimismo estaba en el mismo orden de magnitud del voto obtenido por el Frente de Todos el 24-O-2019 (48,24%%) y el pesimismo se correspondía con el núcleo duro de Juntos por el Cambio. Analogías también se anticipó al cierre del canje en su encuesta de julio, cuando detectó que 77,3% de los argentinos creían que el acuerdo con los acreedores era mucho o bastante importante para la economía argentina, vs casi 12% que lo consideraba poco o nada importante (gráfico arriba)

La consultora Trespuntozero realizó la primera medición inmediata posterior al acuerdo, que arrojó una leve suba (estadísticamente no significativa) en la evaluación de gestión del gobierno nacional: la imagen positiva pasó de 51,2% a 53,5% (+ 2,3 puntos porcentuales), mientras que la negativa insinuó una baja de 43,6% a 42,7% (-0,9 pp; gráfico abajo).

En la misma línea, la encuesta más reciente de Rouvier & Asociados en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) detectó una leve tendencia ascendente luego de confirmarse el acuerdo, que llevó la calificación positiva de Alberto Fernández a casi 67% en el AMBA y anotó una suba de casi 3 puntos porcentuales, mientras que la negativa cedió 2,5 pp (gráfico abajo).

No obstante, es probable que la correa de transmisión del impacto del acuerdo en la imagen del oficialismo tenga un recorrido más largo, con paso intermedio por las expectativas: según Analogías, desde junio pasado el pesimismo a futuro superaba al optimismo (gráfico abajo).

El canje de deuda podría mejorar las perspectivas económicas que venían alicaídas con la pandemia. La encuesta de Trespuntozero ya muestra datos en esa línea: mientras que en marzo el optimismo sobre un acuerdo futuro alcanzaba básicamente al electorado del Frente de Todos, ahora la valoración positiva del arreglo trasciende la grieta: 61,4% lo evalúa como muy bueno o bueno y apenas 18,5% de manera negativa; 20,1% ns/nc. Entre los electores de Alberto Fernández casi 81% lo pondera positivamente y entre los de Macri una mayoría de 51% lo califica de manera favorable. Asimismo, la medición más reciente de Circuitos realizada en el AMBA arroja que 43,5% de los electores de ese conglomerado percibe positivamente los términos del acuerdo, duplicando a la opinión negativa (20,1%); un 36,4% ns/nc (gráfico abajo)

De manera similar, el estudio realizado por el Centro de Opinión Pública de la Universidad de Belgrano en Ciudad de Buenos Aires muestra que el 54% de los electores de ese distrito está al tanto de la negociación de la deuda; dentro de ese grupo, el 40% tiene una opinión muy buena o buena, 27% la ve regular y apenas 16% la califica como mala o muy mala.

A nivel nacional, los datos de Trespuntozero arrojan un primer saldo positivo módico en materia de expectativas: para el 36,2% el acuerdo mejorará la situación de la economía argentina, lo que casi duplica a los pesimistas (19,4%). Entre quienes dicen conocer el acuerdo, casi 40% se muestra optimista, duplicando a los pesimistas (gráfico abajo).

En la misma línea, la medición de Rouvier & Asociados en el AMBA arroja una mejora de la expectativa económica del 52,5% de los electores de ese conglomerado luego del arreglo con los bonistas, vs apenas 13,2% de pesimismo; 28,3% no espera cambios (gráfico abajo)

De manera consistente con esa tendencia, Rouvier & Asociados detectó que el 75,2% cree que el acuerdo será positivo para el país, vs un pesimismo acotado a sólo 11,6% (gráfico abajo).

n este marco, es plausible que el acuerdo impacte positivamente en las próximas encuestas nacionales que releven la imagen presidencial. Esa hipótesis se refuerza según los datos de Trespuntozero, que muestran que el oficialismo gana en la comparación con el gobierno anterior respecto a la resolución de la deuda: 41,5% considera que el Frente de Todos es el espacio político más capacitado para eso, duplicando a quienes se inclinan por Juntos por el Cambio (gráfico abajo). La respuesta a favor del oficialismo alcanza al 86% del caudal que obtuvo en la elección presidencial de octubre pasado, mientras que la inclinación por el espacio opositor apenas cubre al 48% de su voto.

En cambio, el gobierno de Mauricio Macri sale perjudicado como el que más endeudó al país, con 41,5% de las respuestas (gráfico abajo). Esta percepción de la opinión pública coincide con la mirada técnica volcada en un paper de esta semana, en el cual economistas del FMI atribuyen la crisis de deuda externa a las malas decisiones económicas del gobierno de Cambiemos tomadas a partir de una sobreestimación del humor de los inversores internacionales. En síntesis, el conjunto de las encuestas perfila que este "issue" se consolida como un activo favorable al actual gobierno nacional.