"Esta desigualdad profunda expresa la falta de una mirada política integral sobre la pobreza"

Luego de que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) anunciara los índices de la pobreza e indigencia que existen en Argentina, y particularmente en el Gran Córdoba, la referente de la organización Barrios de Pie, Silvia Quevedo, sostuvo que "esta desigualdad profunda expresa la falta de una mirada política integral sobre lo que hay que hacer con este flagelo que es la pobreza".

En diálogo con el programa "Es por Acá", de la FM 102.3, dirigente social agregó que los números del INDEC son alarmantes: "el nivel de pobreza marca una situación muy terrible y trágica en medio de un enemigo invisible como es la pandemia de coronavirus", agregó, indicando que en medio de esta situación tan compleja "fue muy difícil decirle a la gente que se quede en sus casas (durante la cuarentena) cuando vivís en una casa con techo de nylon y piso de tierra, sin agua potable y sin trabajo".

Además, Quevedo sostuvo que esta terrible problemática debe ser atendida de manera multidimensional, "tendiendo puentes, que hay que reconstruir el tejido social", indicó.

En cuanto a la situación de Córdoba en particular, donde la pobreza llega al 46,6% según las cifras dadas a conocer el jueves, la militante sostuvo que "hay un fracaso una serie de políticas públicas que han intentado atender esta situación de muchas compatriotas que sufren esta situación a diario"

"Cuando salen los datos del INDEC se ponen en debate estos temas, pero sólo por un momento y detrás de esas cifras y estadísticas, hay nombres, apellidos, hay sueños, hay niños y niñas que no tienen un vaso de leche para tomar ni un plato de comida en sus mesas" afirmó Quevedo.

Ver también: La pobreza alcanzó al 40,6% en el primer semestre del 2021

Y enfatizó que "es muy complicado porque cuando un niño no tiene leche, no consume carne, después va a tener problemas para tener las mismas oportunidades que otros. Y también va a tener problemas toda la sociedad", reflexionó, para agregar que "la sociedad en general, se ha puesto duro el cuero y ha permanecido en nosotros, las organizaciones, la lucha contra la pobreza, la solidaridad, la reconstrucción con esperanza".

No obstante, sostuvo que aún muchas personas los miran de reojo " como los ´negros de mierda´, como los ´choriplaneros´, que nuestras hijas se embarazan para cobrar un plan social, todo esto asociado a un discurso que busca estigmatizar y deslegitimar el trabajo a diario que hacemos en las barriadas populares", sostuvo.

En cuanto a la tragedia del Covid 19, que vino a profundizar aún mucho más la brecha social, Quevedo indicó que "muchas mujeres y muchos niños dieron sus vidas en esta pandemia, sin abandonar sus lugares en los comedores sociales, casi en un contexto de guerra podríamos decir".

"Ahora se inicia una nueva normalidad y la Argentina que dejamos atrás no es la que queremos, debemos cambiar las recetas para buscar el camino del trabajo, de la educación y de las oportunidades para todos", reclamó la dirigente social.

Además, se refirió a cómo influyeron las políticas neoliberales en las barriadas más vulnerables, indicando que "nosotros podemos dar testimonio de eso: hicieron desastres en los barrios, cómo generaciones de nuestros abuelos y padres eran laburantes y nosotros nunca pudimos ingresar al trabajo formal. Nuestra generación debió inventarse sus propios trabajos mediante la economía popular", señaló.

Escuchá la entrevista completa: 

"Hubo 17 millones de personas que se anotaron para cobrar el IFE, ese es un gran dato que demuestra que nosotros debimos inventarnos un trabajo para sobrevivir, pero es inadmisible que alguien pueda sobrevivir con un plan social. Sólo sirven para complementar las changas", sostuvo, agregando que hay cuestiones de fondo que deben ser discutidas con determinados actores económicos "si la política se anima realmente a intentar cambiar esta realidad tan injusta que vivimos. Hay obras pública, hay trabajos, debemos dar estos debates" consideró.

El flagelo de las organizaciones criminales en los barrios más pobres:

Quevedo contó lo que ellos viven día a día en los barrios más humildes de Córdoba, donde muchos niños y adolescentes caen víctimas de organizaciones criminales que los reclutan para delinquir: "hay muchas mujeres, muchas madres que llegan desesperadas a nuestras organizaciones para pedir capacitaciones en las cooperativas para sus hijos, porque básicamente no quieren que sus hijos terminen siendo parte de una organización criminal, porque en nuestros barrios suceden muchas cosas, y una de ellas es el gran avance de la organizaciones criminales que logran legitimidad en los territorios y que reclutan chicos que tienen ´trabajo´ sin necesidad de mostrar currículum", sostuvo.

Por otro lado, se refirió a la proliferación de cooperativas y trabajos comunitarios que suplen al Estado en los sectores más postergados." Pertenecemos a un mundo que no es recocido por la economía formal ni por nadie, pero que sin embargo creció de manera paralela y hoy tiene cooperativas, equipos de trabajo y todos los días se levanta a las 6 de la mañana para darle de comer a sus hijos. Ahí es donde la política debe construir empatía porque hay muchos que hablan y se sensibilizan pero después esto pasa a ser un tema más", dijo Quevedo.

"No estamos orgullosos de ser pobres", concluyó la dirigente de Barrios de Pie