Pocos minutos demoró Luis Caputo, el ministro de Economía, para considerar, vía redes sociales, que “el equilibrio fiscal es innegociable”.

La referencia era la flamante aprobación de la Ley que modifica la fórmula jubilatoria a nivel nacional, además de prever una recomposición por los últimos meses, donde los haberes de pasivos y pensionados sufrieron una fuerte licuación.

La decisión del Gobierno estaba tomada: la norma será vetada.

También vía redes sociales, el propio Javier Milei daba señales en ese sentido.

Finalmente, un comunicado oficial certificó la determinación, porque “el único objetivo es destruir el programa económico”.

Consideró que el planteo de una nueva modalidad de movilidad es “irresponsable, ilegal e inconstitucional”, y generará “gastos exorbitantes”. Según sus cálculos, se llevará un “1,2% del PBI” y, en números de Milei, un “25% del PBI dinámico”.

El comunicado planteó: “Desde enero, las jubilaciones han aumentado un 5% en términos reales, mientras bajamos el gasto y destruimos la inflación”.

Y le apuntó a los legisladores al remarcar que “la clase política quiere forzar al Gobierno” al veto, lo tildó de “estafa moral” y dejó un capítulo para Mauricio Macri y su espacio: “Confiamos que, los que durante años se han amparado en el cambio, no se presten al juego”.