En la Cámara Novena del Crimen se escucharon este martes los alegatos por un caso de mala praxis que provocó la muerte de Valeria Reinoso.

El 10 de octubre de 2018, la mujer fue sometida a una cirugía estética para colocarse una prótesis mamaria, salió lúcida de la intervención pero en la sala de recuperación terminó en estado vegetativo.

La acusación apuntó a la aplicación de un exceso de opioides con la ignorancia de la intolerancia que tenía Reynoso y el posterior efecto letal.

Luciano Fiorelli, esposo de la víctima, aseguró que hubo un "abandono absoluto de persona, en sala de recuperación en post operatorio, con negligencias diversas que terminaron en daño cerebral irreversible”.

El hombre llegó a apuntar contra el actual ministro de salud, Ricardo Pieckenstainer, quien en aquel momento era el director médico del Hospital Privado.

En calidad de testigo, Pieckenstainer declaró: “hay un espacio de tiempo que nadie sabe qué pasó”.

Este martes en Tribunales se pidieron condenas para una enfermera y un anestesista del Hospital Privado. El pedido fue de 2 años de prisión condicional y tres años de inhabilitación para el anestesista Aníbal Olivazzi. Mientras que la enfermera Yanina Monier fue condenada a un año y ocho meses de prisión condicional y 2 años de inhabilitación.

Para el tercer acusado, el anestesista residente Luis Richetta, se solicitó la absolución en el tribunal.